'Dicen' en la Biblia
los cuales dicen: Venga ya, apresúrese su obra, y veamos; acérquese, y venga el consejo del Santo de Israel, para que lo sepamos!
¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que tornen de lo amargo dulce, y de lo dulce amargo!
Y la sabrá el pueblo, todo él, Efraín y los moradores de Samaria, que con soberbia y con altivez de corazón dicen:
Aun los cipreses {y} los cedros del Líbano se alegran a causa de ti, {y dicen:} `Desde que fuiste derribado, no ha subido talador contra nosotros.'
Los que te ven te observan, te contemplan, {y dicen:} `` ¿Es éste aquel hombre que hacía temblar la tierra, que sacudía los reinos,
No son más que necios los príncipes de Zoán. El consejo de los más sabios consejeros de Faraón se ha vuelto torpe. ¿Cómo dicen a Faraón: `Yo soy hijo de los sabios, hijo de los antiguos reyes?'
Sin embargo hay gozo y alegría, matanza de bueyes y degüello de ovejas; comiendo carne y bebiendo vino, {dicen:} Comamos y bebamos, que mañana moriremos.
¡Ay de los que se esconden del SEÑOR, encubriendo el consejo; y sus obras son en tinieblas, y dicen: ¿Quién nos ve, o quién nos conoce?
Que dicen a los que ven: No veáis; y a los profetas: No nos profeticéis lo recto, decidnos cosas halagüeñas, profetizad errores.
"Pero si me dicen: `Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios,' ¿no es El aquél cuyos lugares altos y cuyos altares Ezequías ha quitado y ha dicho a Judá y a Jerusalén: `Adoren delante de este altar'?
Entonces Isaías profeta vino al rey Ezequías, y le dijo: ¿Qué dicen estos hombres, y de dónde han venido a ti? Y Ezequías respondió: De tierra muy lejos han venido a mí, de Babilonia.
Serán tornados atrás, y serán avergonzados de vergüenza, los que confían en la escultura; y dicen al vaciadizo: Vosotros sois nuestros dioses.
Venid, dicen, tomaré vino, embriaguémonos de sidra; y será el día de mañana como éste, o mucho más excelente.
¿Por qué, dicen, ayunamos, y no hiciste caso? ¿Humillamos nuestras almas, y no lo supiste? He aquí que en el día de vuestro ayuno halláis lo que queréis; y todos demandáis vuestras haciendas.
que dicen: Estate en tu lugar, no te llegues a mí, que soy más santo que tú. Estos son humo en mi furor, fuego que arde todo el día.