'Dio' en la Biblia
Y la tomó Otoniel hijo de Cenaz, hermano menor de Caleb; y él le dio a Acsa su hija por mujer.
Ella entonces le respondió: Dame una bendición; que pues me has dado tierra de secadal, me des también fuentes de aguas. Entonces Caleb le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo.
Y él le dijo: Dame a beber ahora un poco de agua, que tengo sed. Y ella abrió un odre de leche y le dio de beber, y le volvió a cubrir.
El pidió agua, y ella le dio leche; en tazón de nobles le presentó crema.
Y repartiendo los trescientos hombres en tres escuadrones, dio a cada uno de ellos trompetas en sus manos, y cántaros vacíos con teas ardiendo dentro de los cántaros.
y tomó a un joven de los de Sucot, y preguntándole, él le dio por escrito los principales de Sucot y sus ancianos, setenta y siete varones.
Y su concubina que estaba en Siquem, también le dio a luz un hijo; y le puso por nombre Abimelec.
Y la mujer dio a luz un hijo, y le llamó por nombre Sansón. Y el niño creció, y el SEÑOR lo bendijo.
Y el Espíritu del SEÑOR cayó sobre él, y lo despedazó como quien despedaza un cabrito, sin tener nada en su mano; y no dio a entender a su padre ni a su madre lo que había hecho.
Y tomándolo en sus manos, se fue comiéndolo por el camino; y cuando llegó a su padre y a su madre, les dio también a ellos que comiesen; mas no les descubrió que había tomado aquella miel del cuerpo muerto del león.
Y el Espíritu del SEÑOR cayó sobre él, y descendió a Ascalón, e hirió a treinta hombres de ellos; y tomando sus despojos, dio las mudas de vestidos a los que habían explicado el enigma; y encendido en enojo se fue a casa de su padre.
Y dijeron los filisteos: ¿Quién hizo esto? Y les fue dicho: Sansón, el yerno del timnateo, porque le quitó su mujer y la dio a su compañero. Y vinieron los filisteos, y quemaron a fuego a ella y a su padre.
Mas volviendo él a su madre el dinero, tomó su madre doscientos siclos de plata, y los dio al fundidor; y él le hizo de ellos una imagen de talla y de fundición, la cual fue puesta en casa de Micaía.
Y metiéndolos en su casa, dio de comer a sus asnos; y lavaron sus pies, y comieron y bebieron.