'Día' en la Biblia
"Mira, contigo está Simei, hijo de Gera, el Benjamita de Bahurim; él fue el que me maldijo con una terrible maldición el día que yo iba a Mahanaim. Pero cuando descendió a mi encuentro en el Jordán, le juré por el SEÑOR, diciendo: ``No te mataré a espada."
"Porque el día que salgas y pases el torrente Cedrón, ten por cierto que sin duda morirás; tu sangre recaerá sobre tu cabeza."
Entonces el rey envió a llamar a Simei y le dijo: `` ¿No te hice jurar por el SEÑOR y te advertí seriamente: `El día que salgas y vayas a cualquier parte, ten por seguro que ciertamente morirás'? Y tú me dijiste: `La palabra que he oído es buena.'
"Y sucedió que al tercer día después de dar yo a luz, esta mujer también dio a luz; estábamos juntas, nadie de fuera estaba con nosotras en la casa, solamente nosotras dos.
La provisión de Salomón para un día era de 30 coros (6,600 litros) de flor de harina y 60 coros (13,200 litros) de harina,
`Desde el día en que saqué a Mi pueblo Israel de Egipto, no escogí ninguna ciudad de entre todas las tribus de Israel {en la cual} edificar una casa para que Mi nombre estuviera allí, pero escogí a David para que estuviera sobre Mi pueblo Israel.'
que Tus ojos estén abiertos noche y día hacia esta casa, hacia el lugar del cual has dicho: `Mi nombre estará allí,' para que oigas la oración que Tu siervo haga hacia este lugar.
"Que estas palabras mías, con las que he suplicado delante del SEÑOR, estén cerca del SEÑOR nuestro Dios día y noche, para que El haga justicia a Su siervo y justicia a Su pueblo Israel, según las necesidades de cada día,
"Estén, pues, los corazones de ustedes enteramente dedicados al SEÑOR nuestro Dios, para que andemos en Sus estatutos y guardemos Sus mandamientos, como en este día."
Aquel día el rey consagró la parte central del atrio que {estaba} delante de la casa del SEÑOR, pues allí ofreció el holocausto, la ofrenda de cereal y la grasa de las ofrendas de paz; porque el altar de bronce que {estaba} delante del SEÑOR {era} demasiado pequeño para contener el holocausto, la ofrenda de cereal y la grasa de las ofrendas de paz.
Al octavo día despidió al pueblo. Ellos bendijeron al rey, y se fueron a sus tiendas gozosos y alegres de corazón por todo el bien que el SEÑOR había mostrado a Su siervo David y a Su pueblo Israel.
{es decir,} a sus descendientes que habían quedado en la tierra después de ellos, a quienes los Israelitas no habían podido destruir completamente, Salomón les impuso leva de trabajo forzado hasta el día de hoy.
Entonces vino Jeroboam con todo el pueblo a Roboam al tercer día como el rey había dicho, diciendo: ``Vuelvan a mí al tercer día."
Jeroboam instituyó una fiesta en el mes octavo, en el día 15 del mes, como la fiesta que hay en Judá, y subió al altar. Así hizo en Betel (Casa de Dios), ofreciendo sacrificio a los becerros que había hecho. Y puso en Betel a los sacerdotes de los lugares altos que él había construido.
Entonces subió al altar que había hecho en Betel el día 15 del mes octavo, es decir en el mes que él había planeado en su propio corazón. Instituyó una fiesta para los Israelitas y subió al altar para quemar incienso.
Aquel mismo día dio una señal, y dijo: ``Esta es la señal de que el SEÑOR ha hablado: `El altar se romperá y las cenizas que están sobre él se derramarán.'"
Moraba entonces en Betel un anciano profeta; y sus hijos fueron y le contaron todo lo que el hombre de Dios había hecho aquel día en Betel. Las palabras que él había hablado al rey, también las contaron a su padre.
"Y el SEÑOR levantará para sí un rey sobre Israel que destruirá la casa de Jeroboam en este día, y de ahora en adelante.
El pueblo que estaba acampado oyó decir: ``Zimri ha conspirado y también ha matado al rey." Entonces, ese mismo día en el campamento, todo Israel hizo a Omri, jefe del ejército, rey sobre Israel.
"Porque así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `No se acabará la harina en la tinaja ni se agotará el aceite en la vasija, hasta el día en que el SEÑOR mande lluvia sobre la superficie de la tierra.'"
y anduvo por el desierto un día de camino, y vino y se sentó bajo un arbusto (enebro); pidió morirse y dijo: ``Basta ya, SEÑOR, toma mi vida porque yo no soy mejor que mis padres."
Acamparon unos frente a otros por siete días. Al séptimo día comenzó la batalla, y los Israelitas mataron de los Arameos a 100,000 hombres de a pie en un solo día.
Respondió Micaías: ``Tú mismo {lo} verás aquel día en que entres en un aposento interior para esconderte."
Pero la batalla arreció aquel día, y el rey fue sostenido en su carro frente a los Arameos y al atardecer murió. La sangre de la herida corría hasta el fondo del carro.