'Hirió' en la Biblia
Y el SEÑOR los desconcertó delante de Israel, y los hirió con gran matanza en Gabaón. Luego los persiguió por el camino de la subida de Bet Horón y los hirió hasta Azeca y Maceda.
Aquel día Josué conquistó a Maceda. La hirió a filo de espada junto con su rey y la destruyó por completo con todas las personas que había en ella. No dejó ningún sobreviviente, e hizo con el rey de Maceda como había hecho con el rey de Jericó.
El SEÑOR la entregó también, junto con su rey, en manos de Israel, que la hirió a filo de espada con todas las personas que {había} en ella. No dejó ningún sobreviviente en ella, e hizo con su rey como había hecho con el rey de Jericó.
Hirió, pues, Josué toda la tierra: la región montañosa, el Neguev (región del sur), las tierras bajas (la Sefela) y las laderas, y a todos sus reyes. No dejó ningún sobreviviente, sino que destruyó por completo a todo el que tenía vida, tal como el SEÑOR, Dios de Israel, había mandado.
Josué los hirió desde Cades Barnea hasta Gaza, y todo el territorio de Gosén hasta Gabaón.
Por ese mismo tiempo Josué volvió y se apoderó de Hazor e hirió a espada a su rey, porque Hazor antes había sido cabeza de todos estos reinos.
Josué capturó todas las ciudades de estos reyes, y a todos sus reyes. Los hirió a filo de espada {y} los destruyó por completo, tal como Moisés, siervo del SEÑOR, había ordenado.
desde el Monte Halac, que se levanta hacia Seir, hasta Baal Gad en el Valle del Líbano, al pie del Monte Hermón. Capturó a todos sus reyes, los hirió y los mató.
todo el reino de Og en Basán, el cual reinaba en Astarot y en Edrei (sólo él quedaba del remanente de los Refaítas); porque Moisés los hirió y los desposeyó.
todas las ciudades de la llanura, y todo el reino de Sehón, rey de los Amorreos, que reinaba en Hesbón, al cual Moisés hirió, así como a los jefes de Madián, Evi, Requem, Zur, Hur y Reba, príncipes de Sehón que habitaban en aquella tierra.
~`Y si el vengador de la sangre lo persigue, ellos no entregarán al acusado en su mano, porque hirió a su prójimo sin premeditación y sin odiarlo de antemano.