'Manasés' en la Biblia
También habló Josué a los rubenitas y gaditas, y a la media tribu de Manasés, diciendo:
También los hijos de Rubén y los hijos de Gad, y la media tribu de Manasés, pasaron armados delante de los hijos de Israel, según Moisés les había dicho:
A éstos hirieron Moisés siervo de Jehová y los hijos de Israel; y Moisés siervo de Jehová dio aquella tierra en posesión a los rubenitas, gaditas, y a la media tribu de Manasés.
Reparte, pues, tú ahora esta tierra en heredad a las nueve tribus, y a la media tribu de Manasés.
También dio Moisés heredad a la media tribu de Manasés; y fue de la media tribu de los hijos de Manasés, conforme a sus familias.
Y la mitad de Galaad, y Astarot, y Edrei, ciudades del reino de Og en Basán, fueron para los hijos de Maquir, hijo de Manasés, para la mitad de los hijos de Maquir conforme a sus familias.
Porque los hijos de José fueron dos tribus, Manasés y Efraín; y no dieron parte a los levitas en la tierra, sino ciudades en que morasen, con sus ejidos para sus ganados y rebaños.
Recibieron pues heredad los hijos de José, Manasés y Efraín.
Hubo también ciudades que se apartaron para los hijos de Efraín en medio de la herencia de los hijos de Manasés, todas las ciudades con sus aldeas.
También hubo suerte para la tribu de Manasés, pues él era el primogénito de José; y Maquir, el primogénito de Manasés, y padre de Galaad, el cual fue hombre de guerra, tuvo a Galaad y a Basán.
Tuvieron también suerte los otros hijos de Manasés conforme a sus familias; los hijos de Abiezer, y los hijos de Helec, y los hijos de Asriel, y los hijos de Siquem, y los hijos de Hefer, y los hijos de Semida; éstos fueron los hijos varones de Manasés hijo de José, por sus familias.
Pero Zelofehad, hijo de Hefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, no tuvo hijos, sino hijas, los nombres de las cuales son estos: Maala, Noa, Hogla, Milca, y Tirsa.
Y a Manasés le tocaron diez porciones, además de la tierra de Galaad y de Basán, que está al otro lado del Jordán,
porque las hijas de Manasés poseyeron herencia entre sus hijos: y la tierra de Galaad fue de los otros hijos de Manasés.
Y fue el término de Manasés desde Aser hasta Micmetat, la cual está delante de Siquem; y va este término a la mano derecha, a los que habitan en Tapúa.
Y la tierra de Tapúa fue de Manasés; pero Tapúa, que está junto al término de Manasés, es de los hijos de Efraín.
Y desciende este término al arroyo de Cana, hacia el lado sur del arroyo. Estas ciudades de Efraín están entre las ciudades de Manasés: y el término de Manasés es desde el norte del mismo arroyo, y sus salidas son al mar.
Efraín al sur, y Manasés al norte, y el mar es su término; y se encuentran con Aser al lado del norte, y con Isacar al oriente.
Tuvo también Manasés en Isacar y en Aser a Bet-seán y sus aldeas, e Ibleam y sus aldeas, y los moradores de Dor y sus aldeas, y los moradores de Endor y sus aldeas, y los moradores de Taanac y sus aldeas, y los moradores de Meguido y sus aldeas; tres provincias.
Pero los hijos de Manasés no pudieron echar a los de aquellas ciudades; antes el cananeo quiso habitar en la tierra.
Entonces Josué respondió a la casa de José, a Efraín y Manasés, diciendo: Tú eres gran pueblo, y tienes gran fuerza; no tendrás sólo una suerte;
Mas los levitas ninguna parte tienen entre vosotros; porque el sacerdocio de Jehová es la heredad de ellos; Gad también y Rubén, y la media tribu de Manasés, ya han recibido su heredad al otro lado del Jordán al oriente, la cual les dio Moisés siervo de Jehová.
Y al otro lado del Jordán, al oriente de Jericó, señalaron a Beser en el desierto, en la llanura de la tribu de Rubén, y a Ramot en Galaad de la tribu de Gad, y a Golán en Basán de la tribu de Manasés.
Y a los otros hijos de Coat se dieron por suerte diez ciudades de las familias de la tribu de Efraín, y de la tribu de Dan, y de la media tribu de Manasés;
Y a los hijos de Gersón, por las familias de la tribu de Isacar, y de la tribu de Aser, y de la tribu de Neftalí, y de la media tribu de Manasés en Basán, fueron dadas por suerte trece ciudades.
Y de la media tribu de Manasés, a Taanac con sus ejidos, y a Gat-rimón con sus ejidos; dos ciudades.
A los hijos de Gersón de las familias de los levitas, dieron la ciudad de refugio para los homicidas, de la media tribu de Manasés; a Golán en Basán con sus ejidos, y a Beestera con sus ejidos; dos ciudades.
Entonces Josué llamó a los rubenitas, a los gaditas y a la media tribu de Manasés,
También a la media tribu de Manasés había dado Moisés posesión en Basán; mas a la otra media tribu dio Josué heredad entre sus hermanos de este lado del Jordán al occidente: y también a éstos envió Josué a sus tiendas, después de haberlos bendecido.
Y los hijos de Rubén y los hijos de Gad, y la media tribu de Manasés, se volvieron, y se apartaron de los hijos de Israel, de Silo, que está en la tierra de Canaán, para ir a la tierra de Galaad, a la tierra de sus posesiones, de la cual eran poseedores, según palabra de Jehová por mano de Moisés.
Y llegando a los términos del Jordán, que está en la tierra de Canaán, los hijos de Rubén y los hijos de Gad, y la media tribu de Manasés, edificaron allí un altar junto al Jordán, un altar de grande apariencia.
Y los hijos de Israel oyeron decir como los hijos de Rubén y los hijos de Gad, y la media tribu de Manasés, habían edificado un altar delante de la tierra de Canaán, en los términos del Jordán, al paso de los hijos de Israel:
Y enviaron los hijos de Israel a los hijos de Rubén y a los hijos de Gad y a la media tribu de Manasés en la tierra de Galaad, a Finees hijo de Eleazar sacerdote,
Los cuales vinieron a los hijos de Rubén y a los hijos de Gad, y a la media tribu de Manasés, en la tierra de Galaad; y les hablaron, diciendo:
Entonces los hijos de Rubén y los hijos de Gad, y la media tribu de Manasés, respondieron y dijeron a los principales de la multitud de Israel:
Y cuando Finees el sacerdote y los príncipes de la congregación, y las cabezas de la multitud de Israel que con él estaban, oyeron las palabras que hablaron los hijos de Rubén y los hijos de Gad y los hijos de Manasés, les pareció bien.
Y dijo Finees hijo del sacerdote Eleazar, a los hijos de Rubén, a los hijos de Gad, y a los hijos de Manasés: Hoy hemos entendido que Jehová está entre nosotros, pues que no habéis intentado esta traición contra Jehová. Ahora habéis librado a los hijos de Israel de la mano de Jehová.