'Mil' en la Biblia
Los filisteos se pusieron en orden de batalla para enfrentarse a Israel. Entablado el combate, Israel fue derrotado delante de los filisteos, quienes mataron como a cuatro mil hombres en el campo de batalla.
Y pelearon los filisteos, Israel fue derrotado y cada cual huyó a su tienda; la mortandad fue muy grande, pues de Israel cayeron treinta mil soldados de a pie.
{El Señor} hirió a los hombres de Bet-semes porque habían mirado dentro del arca del SEÑOR. De todo el pueblo hirió a cincuenta mil setenta hombres, y el pueblo lloró porque el SEÑOR había herido al pueblo con gran mortandad.
Nombrará para su servicio comandantes de mil y de cincuenta, y {a otros} para labrar sus campos y recoger sus cosechas, y hacer sus armas de guerra y pertrechos para sus carros.
Y los contó en Bezec, y los hijos de Israel eran trescientos mil y los hombres de Judá treinta mil.
Saúl escogió para sí tres mil hombres de Israel, de los cuales dos mil estaban con Saúl en Micmas y en la región montañosa de Betel, y mil estaban con Jonatán en Geba de Benjamín. Y al resto del pueblo lo despidió cada uno a su tienda.
Y los filisteos se reunieron para pelear contra Israel: treinta mil carros, seis mil hombres de a caballo y gente tan numerosa como la arena a la orilla del mar; y subieron y acamparon en Micmas, al oriente de Bet-avén.
Entonces Saúl convocó al pueblo, y los contó en Telaim: doscientos mil soldados de a pie, y diez mil hombres de Judá.
{Tenía} un yelmo de bronce sobre la cabeza y llevaba una cota de malla, y el peso de la cota era de cinco mil siclos de bronce.
Lleva también estos diez quesos al comandante de los mil, y mira a ver cómo están tus hermanos y trae noticias de ellos.
Por tanto, Saúl lo alejó de su presencia nombrándolo comandante de mil hombres; y salía y entraba al frente de la tropa.
Entonces Saúl tomó de todo Israel tres mil hombres escogidos, y fue en busca de David y de sus hombres por los peñascos de las cabras monteses.
Y {había} un hombre en Maón que tenía sus bienes en Carmel; el hombre era muy rico y tenía tres mil ovejas y mil cabras; y estaba en Carmel trasquilando sus ovejas.
Se levantó, pues, Saúl y descendió al desierto de Zif, teniendo consigo tres mil hombres escogidos de Israel, para buscar a David en el desierto de Zif.