'Nos' en la Biblia
Sucedió que al séptimo día el niño murió. Los siervos de David temían informarle que el niño había muerto, pues se decían: ``Si cuando el niño {todavía} estaba vivo, le hablábamos y no nos escuchaba, ¿cómo, pues, vamos a decirle que el niño ha muerto? Puede hacer{se} daño."
Y David dijo a todos sus siervos que {estaban} con él en Jerusalén: ``Levántense y huyamos, porque {si no,} ninguno de nosotros escapará de Absalón. Vayan de prisa, no sea que nos alcance pronto, traiga desgracia sobre nosotros y hiera la ciudad a filo de espada."
Y todo el pueblo reñía en todas las tribus de Israel, diciendo: ``El rey nos ha librado de mano de nuestros enemigos y nos ha salvado de mano de los Filisteos, pero ahora ha huido de la tierra {por causa} de Absalón.
Entonces todos los hombres de Judá respondieron a los hombres de Israel: ``Porque el rey es pariente cercano nuestro. ¿Por qué, pues, están enojados por esto? ¿Acaso hemos comido algo {a costa} del rey, o se nos ha dado algo?"
Pero los hombres de Israel respondieron a los hombres de Judá: ``Nosotros tenemos diez partes en el rey, y por eso también tenemos más {derecho} que ustedes sobre David. ¿Por qué, pues, nos han despreciado? ¿No fue nuestro consejo el primero que se dio para hacer volver a nuestro rey?" Pero las palabras de los hombres de Judá fueron más duras que las palabras de los hombres de Israel.
Y David dijo a Abisai: ``Ahora Seba, hijo de Bicri, nos hará más daño que Absalón. Toma a los siervos de tu señor y persíguelo, no sea que halle para sí ciudades fortificadas y se nos escape."
Entonces los Gabaonitas le respondieron: ``No nos importa la plata ni el oro de Saúl o de su casa, ni nos corresponde dar muerte a ningún hombre en Israel." ``Haré por ustedes lo que digan," les dijo el rey.
Y ellos dijeron al rey: ``Del hombre que nos consumió y que trató de exterminarnos para que no quedáramos dentro del territorio de Israel,
que nos entreguen siete hombres de entre sus hijos, y los ahorcaremos delante del SEÑOR en Guibeá de Saúl, el elegido del SEÑOR." ``{Los} entregaré," dijo el rey.
David respondió a Gad: ``Estoy muy angustiado. Te ruego que nos dejes caer en manos del SEÑOR porque grandes son Sus misericordias, pero no caiga yo en manos de hombre."