'Ocho' en la Biblia
A la edad de ocho días será circuncidado entre vosotros todo varón por vuestras generaciones; {asimismo} el {siervo} nacido en tu casa, o que sea comprado con dinero a cualquier extranjero, que no sea de tu descendencia.
Y circuncidó Abraham a su hijo Isaac a los ocho días, como Dios le había mandado.
Y Betuel engendró a Rebeca. Estos ocho {hijos} dio a luz Milca a Nacor, hermano de Abraham.
Habrá ocho tablas con sus basas de plata, dieciséis basas; dos basas debajo de una tabla y dos basas debajo de la otra tabla.
Había ocho tablas con sus basas de plata; dieciséis basas, dos basas debajo de cada tabla.
El total de los enumerados del campamento de Efraín: ciento ocho mil cien, según sus ejércitos. Y ellos partirán en tercer {lugar.}
Según el censo de todos los varones de un mes arriba, {había} ocho mil seiscientos, que desempeñaban los deberes del santuario.
y cuatro carretas y ocho bueyes dio a los hijos de Merari, conforme a su ministerio, bajo la dirección de Itamar, hijo del sacerdote Aarón.
``El sexto día: ocho novillos, dos carneros, catorce corderos de un año, sin defecto;
Todas las ciudades que daréis a los levitas {serán} cuarenta y ocho ciudades, junto con sus tierras de pasto.
Y el tiempo que nos llevó para venir de Cades-barnea, hasta que cruzamos el torrente de Zered, fue de treinta y ocho años; hasta que pereció toda la generación de los hombres de guerra de en medio del campamento, como el SEÑOR les había jurado.
Todas las ciudades de los levitas en medio de la posesión de los hijos de Israel {fueron} cuarenta y ocho ciudades con sus tierras de pasto.
Entonces se encendió la ira del SEÑOR contra Israel, y los vendió en manos de Cusán-risataim, rey de Mesopotamia; y los hijos de Israel sirvieron a Cusán-risataim por ocho años.
Y tuvo cuarenta hijos y treinta nietos que cabalgaban en setenta asnos. Y juzgó a Israel ocho años.
Elí tenía noventa y ocho años, sus ojos se habían cegado y no podía ver.
David {era} hijo del efrateo de Belén de Judá, llamado Isaí, y {éste} tenía ocho hijos. Isaí en los días de Saúl era {ya} viejo, avanzado {en años} entre los hombres.
El cimiento era de piedras valiosas, piedras grandes, piedras de diez codos y piedras de ocho codos.
Acab, hijo de Omri, comenzó a reinar sobre Israel en el año treinta y ocho de Asa, rey de Judá, y reinó Acab, hijo de Omri, sobre Israel en Samaria veintidós años.
Tenía treinta y dos años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén.
En el año treinta y ocho de Azarías, rey de Judá, Zacarías, hijo de Jeroboam, reinó seis meses sobre Israel en Samaria.
Josías {tenía} ocho años cuando comenzó a reinar, y reinó treinta y un años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Jedida, hija de Adaía, de Boscat.
y a Obed-edom con sus sesenta y ocho parientes; a Obed-edom, también hijo de Jedutún, y a Hosa como porteros.
Los levitas fueron contados de treinta años para arriba, y su número, según el censo de los hombres, fue de treinta y ocho mil.
Puesto que se encontraron más hombres principales entre los descendientes de Eleazar que entre los descendientes de Itamar, los dividieron así: de los descendientes de Eleazar, dieciséis jefes de casas paternas, y ocho de los descendientes de Itamar según sus casas paternas.
El número de los que fueron instruidos en el canto al SEÑOR, con sus parientes, todos los que eran hábiles, {fue de} doscientos ochenta y ocho.
Joram {tenía} treinta y dos años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén.
Tenía treinta y dos años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén; y murió sin que nadie lo lamentara, y lo sepultaron en la ciudad de David, pero no en los sepulcros de los reyes.
Comenzaron la santificación el primer {día} del mes primero, y el octavo día del mes entraron al pórtico del SEÑOR; entonces santificaron la casa del SEÑOR en ocho días, y terminaron el día dieciséis del mes primero.
Josías {tenía} ocho años cuando comenzó a reinar, y reinó treinta y un años en Jerusalén.
Joaquín {tenía} ocho años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses y diez días en Jerusalén, e hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR.
los hijos de Ater, de Ezequías, noventa y ocho;
los hijos de Binúi, seiscientos cuarenta y ocho;
los hijos de Ater, de Ezequías, noventa y ocho;
los hombres de Belén y Netofa, ciento ochenta y ocho;
Los cantores: los hijos de Asaf, ciento cuarenta y ocho.
Los porteros: los hijos de Salum, los hijos de Ater, los hijos de Talmón, los hijos de Acub, los hijos de Hatita, los hijos de Sobai, ciento treinta y ocho.
Todos los hijos de Fares que habitaron en Jerusalén {fueron} cuatrocientos sesenta y ocho hombres fuertes.
Para el director del coro; con instrumentos de cuerda, sobre una lira de ocho cuerdas. Salmo de David.SEÑOR, no me reprendas en tu ira, ni me castigues en tu furor.
Para el director del coro; sobre una lira de ocho cuerdas. Salmo de David.Salva, SEÑOR, porque el piadoso deja de ser; porque los fieles desaparecen de entre los hijos de los hombres.
Reparte {tu} porción con siete, o aun con ocho, porque no sabes qué mal puede venir sobre la tierra.
Pero Ismael, hijo de Netanías, escapó de Johanán con ocho hombres y se fue con los hijos de Amón.
Midió el vestíbulo de la puerta, {y tenía} ocho codos, y sus pilares, dos codos. Y el vestíbulo de la puerta {estaba} hacia el interior.
Sus pórticos {daban} al atrio exterior; y {había} figuras de palmeras en sus pilares, y se subía {por} ocho gradas.
Y sus pórticos {daban} al atrio exterior; y {había} figuras de palmeras en sus pilares a cada lado, y se subía {por} ocho gradas.
Sus pilares {daban} al atrio exterior; y {había} figuras de palmeras en sus pilares a cada lado, y se subía {por} ocho gradas.
{Había} cuatro mesas a un lado y cuatro mesas al otro lado, junto a la puerta: ocho mesas sobre las cuales degollaban {los sacrificios}.
Y El será {nuestra} paz. Cuando el asirio invada nuestra tierra, y cuando huelle nuestros palacios, levantaremos contra él siete pastores y ocho príncipes del pueblo.