'Redención' en la Biblia
Y ésta, viniendo en la misma hora, también daba gracias al Señor, y hablaba de Él a todos los que esperaban la redención en Jerusalén.
Y cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca.
siendo justificados gratuitamente por su gracia mediante la redención que es en Cristo Jesús;
y no sólo ella, sino que también nosotros que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, esto es, la redención de nuestro cuerpo.
Mas por Él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual de Dios nos es hecho sabiduría, y justificación, y santificación y redención;
en quien tenemos redención por su sangre, la remisión de pecados, según las riquezas de su gracia,
que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.
Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual estáis sellados para el día de la redención.
en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.
y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una sola vez en el lugar santísimo, habiendo obtenido eterna redención.
Y por causa de esto Él es mediador del nuevo testamento, para que interviniendo muerte para la redención de las transgresiones que había bajo el primer testamento, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna.