'Sentado' en la Biblia
Cuando las vírgenes fueron reunidas por segunda vez, Mardoqueo estaba sentado a la puerta del rey.
En aquellos días, estando Mardoqueo sentado a la puerta del rey, Bigtán y Teres, dos eunucos del rey, guardianes del umbral, se enojaron y procuraban echar mano al rey Asuero.
Al tercer día Ester se vistió con sus vestiduras reales y se puso en el atrio interior del palacio del rey delante de los aposentos del rey. El rey estaba sentado en su trono real en el aposento del trono, frente a la entrada del palacio.
"Sin embargo nada de esto me satisface mientras vea al Judío Mardoqueo sentado a la puerta del rey."
Entonces el rey dijo a Amán: ``Toma presto el manto y el caballo como has dicho, y hazlo así con el Judío Mardoqueo, que está sentado a la puerta del rey. No omitas nada de todo lo que has dicho."