'Siguiente' en la Biblia
A la mañana siguiente se levantaron bien temprano, adoraron delante del SEÑOR y regresaron de nuevo a su casa en Ramá. Y Elcana se llegó a Ana su mujer, y el SEÑOR se acordó de ella.
A la mañana siguiente, cuando los de Asdod se levantaron temprano, vieron que Dagón había caído rostro en tierra delante del arca del SEÑOR. Así que tomaron a Dagón y lo pusieron otra vez en su lugar.
Pero al levantarse temprano al día siguiente, otra vez Dagón había caído rostro en tierra delante del arca del SEÑOR. Y la cabeza de Dagón y las dos palmas de sus manos {estaban} cortadas sobre el umbral; sólo el tronco le quedaba a Dagón.
A la mañana siguiente, a la vigilia de la mañana (2 a 6 a.m.), Saúl dispuso al pueblo en tres compañías; y entraron en medio del campamento, e hirieron a los Amonitas hasta que calentó el día. Los que quedaron fueron dispersados, no quedando dos de ellos juntos.
Y aconteció al día siguiente que un espíritu malo {de parte} de Dios se apoderó de Saúl, y éste deliraba en medio de la casa, mientras David tocaba {el arpa} con su mano como de costumbre. Saúl {tenía} la lanza en la mano,
Pero al día siguiente, el segundo {día} de la luna nueva, el lugar de David estaba aún vacío. Entonces Saúl dijo a su hijo Jonatán: `` ¿Por qué no ha venido el hijo de Isaí a la comida ni ayer ni hoy?"
A la mañana {siguiente} Jonatán salió al campo para reunirse con David, y un muchacho pequeño {iba} con él.
Y David los hirió desde el anochecer hasta el atardecer del día siguiente. Ninguno de ellos escapó, excepto 400 jóvenes que montaron en camellos y huyeron.
Al día siguiente, cuando vinieron los Filisteos a despojar a los muertos, hallaron a Saúl y a sus tres hijos caídos en el Monte Gilboa.