'Sin' en la Biblia
Sin embargo no escucharon a sus jueces, porque se prostituyeron siguiendo a otros dioses, y se postraron ante ellos. Se apartaron pronto del camino en que sus padres habían andado en obediencia a los mandamientos del SEÑOR. No hicieron como {sus padres.}
Así pues, el SEÑOR permitió que aquellas naciones se quedaran {allí,} sin expulsarlas enseguida, ni las entregó en manos de Josué.
Después que él salió, vinieron los siervos y vieron que las puertas de la sala de la terraza tenían el cerrojo pasado, y dijeron: ``Sin duda {que el rey} está haciendo su necesidad en la sala de verano."
``Ciertamente iré contigo," le dijo Débora. ``Sin embargo, el honor no será tuyo en la jornada que vas a emprender, porque el SEÑOR venderá a Sísara en manos de una mujer." Entonces Débora se levantó y fue con Barac a Cedes.
Y Gedeón entró y preparó un cabrito y pan sin levadura con un efa de harina (22 litros). Puso la carne en una cesta y el caldo en un caldero, y {los} llevó y {se los} presentó al ángel debajo de la encina.
Y el ángel de Dios le dijo: ``Toma la carne y el pan sin levadura, ponlos sobre esta peña y derrama el caldo." Y así lo hizo Gedeón.
Entonces el ángel del SEÑOR extendió la punta de la vara que estaba en su mano y tocó la carne y el pan sin levadura. Y subió fuego de la roca que consumió la carne y el pan sin levadura. Y el ángel del SEÑOR desapareció de su vista.
El peso de los zarcillos de oro que él pidió fue de 1,700 {siclos} (19.4 kilos) de oro, sin contar los adornos de media luna, los pendientes y los vestidos de púrpura que {llevaban} los reyes de Madián y sin contar los collares que {llevaban} sus camellos al cuello.
Los hombres de Efraín se reunieron y cruzaron {el Jordán} hacia el norte (hacia Zafón), y dijeron a Jefté: `` ¿Por qué cruzaste a pelear contra los Amonitas sin llamarnos para que fuéramos contigo? Quemaremos tu casa sobre ti."
Sin piedad los hirió con gran mortandad. Y descendió y habitó en la hendidura de la peña de Etam.
"Sin embargo, tenemos paja y forraje para nuestros asnos, y también pan y vino para mí, para tu sierva y para el joven que está con tu siervo; no {nos} falta nada."
De toda esta gente, 700 hombres escogidos eran zurdos; capaces cada uno de lanzar {con la honda} una piedra a un cabello sin errar.
Cercaron a Benjamín, lo persiguieron sin tregua {y} lo aplastaron frente a Guibeá, hacia el oriente.