'Sino' en la Biblia
Y Eliseo le dijo: ¿Qué te haré yo? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una botija de aceite.
Después hizo enalbardar una borrica, y dijo al mozo: Guía y anda; y no me hagas detener para que suba, sino cuando yo te lo dijere.
Y volvió al varón de Dios, él y toda su compañía, y púsose delante de él, y dijo: He aquí ahora conozco que no hay Dios en toda la tierra, sino en Israel. Ruégote que recibas algún presente de tu siervo.
Entonces Naamán dijo: Ruégote pues, ¿no se dará á tu siervo una carga de un par de acémilas de aquesta tierra? porque de aquí adelante tu siervo no sacrificará holocausto ni sacrificio á otros dioses, sino á Jehová.
Entonces uno de los siervos dijo: No, rey, señor mío; sino que el profeta Eliseo está en Israel, el cual declara al rey de Israel las palabras que tú hablas en tu más secreta cámara.
Y vinieron, y dieron voces á los guardas de la puerta de la ciudad, y declaráronles, diciendo: Nosotros fuimos al campo de los Siros, y he aquí que no había allí hombre, ni voz de hombre, sino caballos atados, asnos también atados, y el campo como se esta
Y entró Jehú con Jonadab hijo de Rechâb en el templo de Baal, y dijo á los siervos de Baal: Mirad y ved que por dicha no haya aquí entre vosotros alguno de los siervos de Jehová, sino solos los siervos de Baal.
Llamando entonces el rey Joas al pontífice Joiada y á los sacerdotes, díjoles: ¿Por qué no reparáis las aberturas del templo? Ahora pues, no toméis más el dinero de vuestros familiares, sino dadlo para reparar las roturas del templo.
Porque no le había quedado gente á Joachâz, sino cincuenta hombres de á caballo, y diez carros, y diez mil hombres de á pié; pues el rey de Siria los había destruído, y los había puesto como polvo para hollar.
Jehová por tanto se airó en gran manera contra Israel, y quitólos de delante de su rostro; que no quedó sino sólo la tribu de Judá.
Porque se llegó á Jehová, y no se apartó de él, sino que guardó los mandamientos que Jehová prescribió á Moisés.
Y que pusieron en el fuego á sus dioses, por cuanto ellos no eran dioses, sino obra de manos de hombres, madera ó piedra, y así los destruyeron.
Resultados de Búsqueda por Versiones
- J2000 (11)
- LBDA (23)
- NBLH (21)
- RV (15)
- SEV (11)
- RV1909 (12)
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (15)
- Éxodo (8)
- Levítico (6)
- Números (10)
- Deuteronomio (7)
- Josué (8)
- Jueces (5)
- Rut (1)
- 1 Samuel (16)
- 2 Samuel (10)
- 1 Reyes (17)
- 2 Reyes (12)
- 1 Crónicas (8)
- 2 Crónicas (18)
- Esdras (1)
- Nehemías (4)
- Ester (3)
- Job (1)
- Salmos (12)
- Proverbios (2)
- Eclesiastés (6)
- Isaías (18)
- Jeremías (28)
- Lamentaciones (1)
- Ezequiel (21)
- Daniel (5)
- Oseas (3)
- Amós (2)
- Zacarías (3)
- Mateo (30)
- Marcos (23)
- Lucas (18)
- Juan (38)
- Hechos (16)
- Romanos (24)
- 1 Corintios (35)
- 2 Corintios (23)
- Gálatas (13)
- Efesios (10)
- Filipenses (8)
- Colosenses (1)
- 1 Tesalonicenses (5)
- 2 Tesalonicenses (3)
- 1 Timoteo (10)
- 2 Timoteo (4)
- Tito (2)
- Filemón (1)
- Hebreos (9)
- Santiago (6)
- 1 Pedro (14)
- 2 Pedro (4)
- 1 Juan (9)
- 2 Juan (3)
- 3 Juan (1)
- Judas (1)
- Apocalipsis (8)