Éxodo 11:8
Y descenderán a mí todos estos tus siervos y se inclinarán ante mí, diciendo: ``Sal, tú y todo el pueblo que te sigue"; y después de esto yo saldré. Y {Moisés} salió ardiendo en ira de la presencia de Faraón.
Éxodo 12:31-33
Entonces llamó a Moisés y a Aarón {aún} de noche, y dijo: Levantaos {y} salid de entre mi pueblo, vosotros y los hijos de Israel; e id, adorad al SEÑOR, como habéis dicho.
Números 12:3
(Moisés era un hombre muy humilde, más que cualquier otro hombre sobre la faz de la tierra.)
Deuteronomio 29:24
Y dirán todas las naciones: `` ¿Por qué ha hecho así el SEÑOR a esta tierra? ¿Por qué esta gran explosión de ira?"
Deuteronomio 32:24
``{Serán} debilitados por el hambre, y consumidos por la plaga y destrucción amarga; dientes de fieras enviaré sobre ellos, con veneno de {serpientes} que se arrastran en el polvo.
Jueces 4:10
Y Barac convocó a Zabulón y a Neftalí en Cedes, y subieron con él diez mil hombres; Débora también subió con él.
Jueces 8:5
Y dijo a los hombres de Sucot: Os ruego que deis pan a la gente que me sigue, porque están cansados, y estoy persiguiendo a Zeba y a Zalmuna, reyes de Madián.
1 Reyes 20:10
Y Ben-adad envió a decirle: Así me hagan los dioses y aun me añadan, si el polvo de Samaria bastará para llenar las manos de todo el pueblo que me sigue.
2 Reyes 3:9
Fue el rey de Israel con el rey de Judá y el rey de Edom; y dando un rodeo anduvieron siete días de camino; y no había agua para el ejército ni para los animales que los seguían.
Salmos 6:1
Para el director del coro; con instrumentos de cuerda, sobre una lira de ocho cuerdas. Salmo de David.SEÑOR, no me reprendas en tu ira, ni me castigues en tu furor.
Isaías 49:23
Reyes serán tus tutores, y sus princesas, tus nodrizas. Rostro en tierra te rendirán homenaje y el polvo de tus pies lamerán. Y sabrás que yo soy el SEÑOR, y que no se avergonzarán los que esperan en mí.
Isaías 49:26
Haré comer a tus opresores su propia carne, y como con vino dulce, con su sangre se embriagarán; y toda carne sabrá que yo, el SEÑOR, soy tu Salvador y tu Redentor, el Poderoso de Jacob.
Ezequiel 3:14
Y el Espíritu me levantó y me tomó; yo iba con amargura en la indignación de mi espíritu, y la mano del SEÑOR era fuerte sobre mí.
Daniel 3:19
Entonces Nabucodonosor se llenó de furor, y demudó su semblante contra Sadrac, Mesac y Abed-nego. Respondió ordenando que se calentara el horno siete veces más de lo que se acostumbraba calentar.
Marcos 3:5
Y mirándolos en torno con enojo, entristecido por la dureza de sus corazones, dijo* al hombre:
Apocalipsis 3:9
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido