Éxodo 4:7

Y dijo: Vuelve a meter tu mano en tu seno; y él volvió a meter su mano en su seno; y volviéndola a sacar del seno, he aquí que se había vuelto como la otra carne.

2 Reyes 5:14

Él entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y fue limpio.

Deuteronomio 32:39

Ved ahora que yo, yo soy, y no hay dioses conmigo; yo hago morir, y yo hago vivir; yo hiero, y yo curo; y no hay quien pueda librar de mi mano.

Mateo 8:3

Y Jesús extendiendo su mano le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante quedó limpio de su lepra.

Números 12:13-15

Entonces Moisés clamó a Jehová, diciendo: Te ruego, oh Dios, que la sanes ahora.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)