49 Versículo de la Biblia sobre ayudar a los pobres

Si he impedido a los pobres {su} deseo, o he hecho desfallecer los ojos de la viuda,

porque yo libraba al pobre que clamaba, y al huérfano que no tenía quien le ayudara.

Defendió la causa del pobre y del necesitado; entonces {le} fue bien. ¿No es esto conocerme? --declara el SEÑOR.

El que se apiada del pobre presta al SEÑOR, y El lo recompensará por su buena obra.

Para el director del coro. Salmo de David.Bienaventurado el que piensa en el pobre; en el día del mal el SEÑOR lo librará.

para privar de justicia a los necesitados, para robar de {sus} derechos a los pobres de mi pueblo, para hacer de las viudas su botín, y despojar a los huérfanos!

Había entonces en Jope una discípula llamada Tabita (que traducido {al griego} es Dorcas); esta mujer era rica en obras buenas y de caridad que hacía continuamente.

Pero tú, cuando des limosna, que no sepa tu {mano} izquierda lo que hace tu derecha,

Padre era para los necesitados, y examinaba la causa que no conocía.

Porque nunca faltarán pobres en tu tierra; por eso te ordeno, diciendo: ``Con liberalidad abrirás tu mano a tu hermano, al necesitado y al pobre en tu tierra."

Por eso, cuando des limosna, no toques trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres. En verdad os digo {que ya} han recibido su recompensa.

El que cierra su oído al clamor del pobre, también él clamará y no recibirá respuesta.

Si hay un menesteroso contigo, uno de tus hermanos, en cualquiera de tus ciudades en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, no endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano a tu hermano pobre,

¿No es para que partas tu pan con el hambriento, y recibas en casa a los pobres sin hogar; para que cuando veas al desnudo lo cubras, y no te escondas de tu semejante?

Pues el necesitado no será olvidado para siempre, ni la esperanza de los afligidos perecerá eternamente.

Porque él librará al necesitado cuando clame, también al afligido y al que no tiene quien le auxilie.

Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros; y cuando queráis les podréis hacer bien; pero a mí no siempre me tendréis.

Pero al pobre levanta de la miseria y lo pone seguro en alto, y multiplica {sus} familias como un rebaño.

Haga él justicia a los afligidos del pueblo, salve a los hijos de los pobres, y aplaste al opresor.

El que da al pobre no pasará necesidad, pero el que cierra sus ojos tendrá muchas maldiciones.

El que oprime al pobre para engrandecerse, o da al rico, sólo {llegará a} la pobreza.

Tendrá compasión del pobre y del necesitado, y la vida de los necesitados salvará.

El rico y el pobre tienen un lazo común: el que hizo a ambos es el SEÑOR.

Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros, pero a mí no siempre me tendréis.

Defended al débil y al huérfano; haced justicia al afligido y al menesteroso.

Por cuanto yo estoy afligido y necesitado, el Señor me tiene en cuenta. Tú eres mi socorro y mi libertador; Dios mío, no te tardes.

porque afligido y necesitado estoy, y mi corazón está herido dentro de mí.

Yo sé que el SEÑOR sostendrá la causa del afligido, {y} el derecho de los pobres.

Rescatad al débil y al necesitado; librad{los} de la mano de los impíos.

haciendo que el clamor del pobre llegara a El, y que oyera el clamor de los afligidos.

Por la desolación del afligido, por los gemidos del menesteroso, me levantaré ahora, dice el SEÑOR; lo pondré en la seguridad que anhela.

Bienaventurados los pobres en espíritu, pues de ellos es el reino de los cielos.

Extiende su mano al pobre, y alarga sus manos al necesitado.

Pero dijo esto, no porque se preocupara por los pobres, sino porque era un ladrón, y como tenía la bolsa del dinero, sustraía de lo que se echaba en ella.

Y dejaré en medio de ti un pueblo humilde y pobre, que se refugiará en el nombre del SEÑOR.

Mas yo estoy afligido y necesitado; oh Dios, ven pronto a mí. Tú eres mi socorro y mi libertador; SEÑOR, no te tardes.

Porque El está a la diestra del pobre, para salvarlo de los que juzgan su alma.

aprended a hacer el bien, buscad la justicia, reprended al opresor, defended al huérfano, abogad por la viuda.

Cuídate de que no haya pensamiento perverso en tu corazón, diciendo: ``El séptimo año, el año de remisión, está cerca", y mires con malos ojos a tu hermano pobre, y no le des nada; porque él podrá clamar al SEÑOR contra ti, y esto te será pecado.

La fortuna del rico es su fortaleza, la ruina de los pobres es su pobreza.

El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor, pero el que se apiada del necesitado le honra.

Que beba y se olvide de su pobreza, y no recuerde más su aflicción.

Sólo {nos pidieron} que nos acordáramos de los pobres, lo mismo que yo estaba también deseoso de hacer.

El que desprecia a su prójimo peca, pero es feliz el que se apiada de los pobres.

No robes al pobre, porque es pobre, ni aplastes al afligido en la puerta;

Y si diera todos mis bienes para dar de comer {a los pobres,} y si entregara mi cuerpo para ser quemado, pero no tengo amor, de nada me aprovecha.

Dad más bien lo que está dentro como obra de caridad, y entonces todo os será limpio.

y dijo*: ``Cornelio, tu oración ha sido oída, y tus obras de caridad han sido recordadas delante de Dios.