70 Versículo de la Biblia sobre Cosecha
Versículos Más Relevantes
Mientras la tierra permanezca, la siembra y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, el día y la noche, nunca cesarán.
Entonces dijo* a sus discípulos: La mies es mucha, pero los obreros pocos.
Y el que suministra semilla al sembrador y pan para {su} alimento, suplirá y multiplicará vuestra sementera y aumentará la siega de vuestra justicia;
``Ciertamente, vuestra trilla os durará hasta la vendimia, y la vendimia hasta el tiempo de la siembra. Comeréis, pues, vuestro pan hasta que os saciéis y habitaréis seguros en vuestra tierra.
La tierra ha dado su fruto; Dios, nuestro Dios, nos bendice.
Ciertamente el SEÑOR dará lo que es bueno, y nuestra tierra dará su fruto.
y siembren campos, planten viñas, y recojan una cosecha abundante.
El SEÑOR ha jurado por su diestra y por su fuerte brazo: Nunca más daré tu grano por alimento a tus enemigos, ni hijos de extranjeros beberán tu mosto por el que trabajaste; pero los que lo cosechen, lo comerán y alabarán al SEÑOR; y los que lo recolecten, lo beberán en los atrios de mi santuario.
``Y no dicen en su corazón: `Temamos ahora al SEÑOR nuestro Dios, que da la lluvia a su tiempo, tanto la lluvia de otoño como la de primavera, y que reserva para nosotros las semanas establecidas de la cosecha.'
Seis años sembrarás tu tierra y recogerás su producto; pero el séptimo año la dejarás descansar, sin cultivar, para que coman los pobres de tu pueblo, y de lo que ellos dejen, coman las bestias del campo. Lo mismo harás con tu viña {y} con tu olivar.
Seis días trabajarás, mas en el séptimo día descansarás; {aun} en el tiempo de arar y de segar, descansarás.
``Cuando siegues la mies de tu tierra, no segarás hasta los últimos rincones de tu campo, ni espigarás el sobrante de tu mies.
``Cuando seguéis la mies de vuestra tierra, no segaréis hasta el último rincón de ella ni espigaréis el sobrante de vuestra mies; los dejaréis para el pobre y para el forastero. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios."
pero el séptimo año la tierra tendrá completo descanso, un reposo para el SEÑOR; no sembrarás tu campo ni podarás tu viña. ``Lo que nazca espontáneamente {después} de tu cosecha no lo segarás, y las uvas de los sarmientos de tu viñedo no recogerás; la tierra tendrá un año de reposo.
Todo lo mejor del aceite nuevo y todo lo mejor del mosto y del cereal, las primicias que presenten al SEÑOR, te las daré a ti. Los primeros frutos maduros de todo lo que hay en su tierra, que traigan al SEÑOR, serán tuyos. Todo el que esté limpio en tu casa podrá comer de ello.
Cuando siegues tu mies en tu campo y olvides alguna gavilla en el campo, no regresarás a recogerla; será para el forastero, para el huérfano y para la viuda, para que el SEÑOR tu Dios te bendiga en toda obra de tus manos. Cuando sacudas tus olivos, no recorrerás las ramas que hayas dejado tras de ti, serán para el forastero, para el huérfano y para la viuda. Cuando vendimies tu viña, no la repasarás; será para el forastero, para el huérfano y para la viuda.
También {guardarás} la fiesta de la siega de los primeros frutos de tus labores, de lo que siembres en el campo; y la fiesta de la cosecha al fin del año cuando recojas del campo {el fruto} {de} tu trabajo.
También celebrarás la fiesta de las semanas, {es decir,} los primeros frutos de la siega del trigo, y la fiesta de la cosecha al final del año.
Habla a los hijos de Israel y diles: ``Cuando entréis en la tierra que yo os daré, y seguéis su mies, entonces traeréis al sacerdote una gavilla de las primicias de vuestra cosecha. ``Y él mecerá la gavilla delante del SEÑOR, a fin de que seáis aceptados; el día siguiente al día de reposo el sacerdote la mecerá. ``El mismo día en que meciereis la gavilla, ofreceréis un cordero de un año sin defecto como holocausto al SEÑOR.Leer más.
``La ofrenda de cereal será de dos décimas {de un efa} de flor de harina mezclada con aceite, ofrenda encendida para el SEÑOR, {como} aroma agradable, con su libación, un cuarto de hin de vino. ``Hasta ese mismo día, hasta que hayáis traído la ofrenda de vuestro Dios, no comeréis pan, ni grano tostado, ni espiga tierna. Estatuto perpetuo será para todas vuestras generaciones dondequiera que habitéis. ``Contaréis desde el día que sigue al día de reposo, desde el día en que trajisteis la gavilla de la ofrenda mecida; contaréis siete semanas completas. ``Contaréis cincuenta días hasta el día siguiente al séptimo día de reposo; entonces presentaréis una ofrenda de espiga tierna al SEÑOR.
{Durante} siete días celebrarás la fiesta de los tabernáculos, cuando hayas recogido {el producto} de tu era y de tu lagar. Y te alegrarás en tu fiesta, tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, el levita y el forastero, el huérfano y la viuda que están en tus ciudades. Siete días celebrarás fiesta al SEÑOR tu Dios en el lugar que escoja el SEÑOR; porque el SEÑOR tu Dios te bendecirá en todos tus productos y en toda la obra de tus manos; por tanto, estarás realmente alegre.
Y volvió Noemí, y con ella su nuera Rut la moabita, regresando así de los campos de Moab. Llegaron a Belén al comienzo de la siega de la cebada.
y cuando los que llevaban el arca entraron en el Jordán y los pies de los sacerdotes que llevaban el arca se mojaron en la orilla del agua (porque el Jordán se desborda por todas sus riberas todos los días de la cosecha),
Después de algún tiempo, en los días de la siega del trigo, sucedió que Sansón visitó a su mujer con un cabrito, y dijo: Llegaré a mi mujer en {su} recámara. Pero el padre de ella no lo dejó entrar.
{El pueblo de} Bet-semes estaba segando el trigo en el valle, y alzaron sus ojos y vieron el arca, y se alegraron al ver{la.}
¿No es ahora la siega del trigo? Yo clamaré al SEÑOR, para que mande truenos y lluvia. Entonces conoceréis y veréis que es grande la maldad que habéis hecho ante los ojos del SEÑOR, al pedir para vosotros un rey.
y los entregó en manos de los gabaonitas, que los ahorcaron en el monte delante del SEÑOR, de modo que los siete cayeron a la vez; les dieron muerte en los primeros días de la cosecha, al comienzo de la cosecha de la cebada. Y Rizpa, hija de Aja, tomó tela de cilicio y lo tendió para sí sobre la roca, desde el comienzo de la cosecha hasta que llovió del cielo sobre ellos; y no permitió que las aves del cielo se posaran sobre ellos de día ni las fieras del campo de noche.
Descendieron tres de los treinta jefes y fueron a David en la cueva de Adulam al tiempo de la cosecha, mientras la tropa de los filisteos acampaba en el valle de Refaím.
Pasó la siega, terminó el verano, y nosotros no hemos sido salvados.
Multiplicaste la nación, aumentaste su alegría; se alegran en tu presencia como con la alegría de la cosecha, como se regocijan {los hombres} cuando se reparten el botín.
Los que siembran con lágrimas, segarán con gritos de júbilo. El que con lágrimas anda, llevando la semilla de la siembra, en verdad volverá con gritos de alegría, trayendo sus gavillas.
Por eso lloraré amargamente por Jazer, por la viña de Sibma; te bañaré con mis lágrimas, oh Hesbón y Eleale, porque sobre tus frutos de verano y sobre tu cosecha se ha extinguido el clamor,
El que recoge en el verano es hijo sabio, el que duerme durante la siega es hijo que avergüenza.
Donde no hay bueyes, el pesebre está limpio, pero mucho rendimiento {se obtiene} por la fuerza del buey.
Desde el otoño, el perezoso no ara, pide en la cosecha, y no hay nada.
Han sembrado trigo y han segado espinos, se han esforzado sin provecho alguno. Avergonzaos, pues, de vuestras cosechas a causa de la ardiente ira del SEÑOR.
Porque te olvidaste del Dios de tu salvación y no te acordaste de la roca de tu refugio. Por tanto, siembras plantas deleitosas y les injertas sarmientos de un {dios} extraño. El día que {las} plantes {las} cercarás con cuidado, y por la mañana harás que florezca tu semilla; {pero} la cosecha {será} un montón {inservible} en el día de enfermedad y de dolor incurable.
Dentro de un año y {algunos} días, os conturbaréis, {hijas} confiadas, porque se habrá acabado la vendimia, {y} la recolección {del fruto} no vendrá.
`Ciertamente los destruiré' --declara el SEÑOR--; `no habrá uvas en la vid, ni higos en la higuera, y la hoja se marchitará; lo que les he dado, pasará de ellos.'"
Avergonzaos, labradores, gemid, viñadores, por el trigo y la cebada, porque la cosecha del campo se ha perdido.
Y además os retuve la lluvia cuando aún {faltaban} tres meses para la siega; hice llover sobre una ciudad y sobre otra ciudad no hice llover; sobre una parte llovía, y la parte donde no llovía, se secó.
Sembrarás, pero no segarás; pisarás la oliva, pero no te ungirás con aceite, y la uva, pero no beberás vino.
Sembráis mucho, pero recogéis poco; coméis, pero no hay {suficiente} para que os saciéis; bebéis, pero no hay {suficiente} para que os embriaguéis; os vestís, pero nadie se calienta; y el que recibe salario, recibe salario en bolsa rota.
Devorará tu mies y tu pan, devorará a tus hijos y a tus hijas, devorará tus ovejas y tus vacas, devorará tus viñas y tus higueras; a espada destruirá tus ciudades fortificadas en que confías.
Y su abundante fruto es para los reyes que tú pusiste sobre nosotros a causa de nuestros pecados, los cuales dominan nuestros cuerpos y nuestros ganados como les place, y en gran angustia estamos.
Su cosecha devoran los hambrientos, la toman aun de {entre} los espinos, y el intrigante ansía su riqueza.
porque sería fuego que consume hasta el Abadón, y arrancaría toda mi ganancia.
Meted la hoz, que la mies está madura; venid, pisad, que el lagar está lleno; las tinajas rebosan, porque grande es su maldad.
Entonces dijo* a sus discípulos: La mies es mucha, pero los obreros pocos. Por tanto, rogad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies.
Y no nos cansemos de hacer el bien, pues a su tiempo, si no nos cansamos, segaremos.
Entonces salió del templo otro ángel clamando a gran voz al que estaba sentado en la nube: Mete tu hoz y siega, porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra está madura. Y el que estaba sentado en la nube blandió su hoz sobre la tierra, y la tierra fue segada.
Con el fruto de su boca el hombre sacia su vientre, {con} el producto de sus labios se saciará.
Como frescura de nieve en tiempo de la siega es el mensajero fiel para los que lo envían, porque refresca el alma de sus señores.
Como nieve en el verano y como lluvia en la siega, así la honra no es apropiada para el necio.
Será como cuando el segador recoge la mies, y su brazo cosecha las espigas; o será como el que recoge espigas en el valle de Refaim.
Porque así me ha dicho el SEÑOR: Me estaré quieto y miraré desde mi morada, como calor resplandeciente al sol, como nube de rocío en el calor de la cosecha. Pues antes de la cosecha, tan pronto como el botón se abra y la flor se convierta en uva madura, El cortará los pámpanos con podaderas y podará {y} quitará los sarmientos.
Porque así será en medio de la tierra, entre los pueblos, como cuando se varea el olivo, como en los rebuscos cuando se acaba la vendimia.
Y la flor marchita de su gloriosa hermosura, que está sobre la cabeza del valle fértil, será como el primer higo maduro antes del verano, el cual uno ve, {y} tan pronto está en su mano se lo traga.
se recoge el botín {como} recoge la oruga, se lanzan sobre él como se lanzan las langostas.
`Santo era Israel para el SEÑOR, primicias de su cosecha; todos los que comían de ella se hacían culpables; el mal venía sobre ellos' --declara el SEÑOR."
Porque así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: La hija de Babilonia es como una era al tiempo de ser hollada; dentro de poco, le llegará el tiempo de la siega.
Para ti también, oh Judá, hay preparada una cosecha, cuando yo restaure el bienestar de mi pueblo.
``Dejad que ambos crezcan juntos hasta la siega; y al tiempo de la siega diré a los segadores: `Recoged primero la cizaña y atadla en manojos para quemarla, pero el trigo recogedlo en mi granero.'"
Y cuando el fruto lo permite, él enseguida mete la hoz, porque ha llegado {el tiempo de} la siega.
Entonces comenzó a hablarles en parábolas: Un hombre PLANTO UNA VIÑA Y LA CERCO CON UN MURO, CAVO UN ESTANQUE DEBAJO DEL LAGAR Y EDIFICO UNA TORRE; la arrendó a labradores y se fue de viaje. Al tiempo {de la vendimia} envió un siervo a los labradores para recibir de los labradores {su parte} de los frutos de la viña. Pero ellos, echándole mano, lo golpearon y lo enviaron con las manos vacías.Leer más.
De nuevo les mandó otro siervo, y a él lo hirieron en la cabeza y lo trataron vergonzosamente. Y envió a otro y a éste lo mataron; y {así con} otros muchos, golpeando a unos y matando a otros. Todavía le quedaba uno, un hijo amado; y les envió a este último, diciendo: ``Respetarán a mi hijo." Pero aquellos labradores se dijeron entre sí: ``Este es el heredero; ¡venid, matémosle, y la heredad será nuestra!" Y echándole mano, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña. ¿Qué hará, entonces, el dueño de la viña? Vendrá y destruirá a los labradores, y dará la viña a otros.
Y les decía: La mies es mucha, pero los obreros pocos; rogad, por tanto, al Señor de la mies que envíe obreros a su mies.
¿No decís vosotros: ``Todavía faltan cuatro meses, y {después} viene la siega"? He aquí, yo os digo: Alzad vuestros ojos y ved los campos que {ya} están blancos para la siega. Ya el segador recibe salario y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra se regocije juntamente con el que siega.
Y no quiero que ignoréis, hermanos, que con frecuencia he hecho planes para ir a visitaros (y hasta ahora me he visto impedido) a fin de obtener algún fruto también entre vosotros, así como entre los demás gentiles.
¿O lo dice especialmente por nosotros? Sí, se escribió por nosotros, porque el que ara debe arar con esperanza, y el que trilla {debe trillar} con la esperanza de recibir {de la cosecha}. Si en vosotros sembramos lo espiritual, ¿será demasiado que de vosotros cosechemos lo material?
Al presente ninguna disciplina parece ser causa de gozo, sino de tristeza; sin embargo, a los que han sido ejercitados por medio de ella, les da después fruto apacible de justicia.
Y la semilla cuyo fruto es la justicia se siembra en paz por aquellos que hacen la paz.