Oseas 14:7

Volverán, y se sentarán bajo su sombra; serán vivificados como trigo, y florecerán como la vid; su olor será como el del vino del Líbano.

Salmos 91:1

El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente.

Salmos 85:6

¿No volverás a darnos vida, para que tu pueblo se regocije en ti?

Salmos 138:7

Aunque yo anduviere en medio de la angustia, tú me vivificarás: Contra la ira de mis enemigos extenderás tu mano, y me salvará tu diestra.

Cantares 2:3

Como el manzano entre los árboles silvestres, así es mi amado entre los jóvenes: Con gran deleite me senté bajo su sombra, y su fruto fue dulce a mi paladar.

Cantares 6:11

Al huerto de los nogales descendí, a ver los frutos del valle, y para ver si brotaban las vides, si florecían los granados.

Isaías 32:1-2

He aquí que en justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio.

Isaías 61:11

Porque como la tierra produce su renuevo, y como el huerto hace brotar lo sembrado en él, así Jehová el Señor hará brotar justicia y alabanza delante de todas las naciones.

Ezequiel 17:23

En el monte alto de Israel lo plantaré, y alzará ramas, y llevará fruto, y se hará magnífico cedro; y todas las especies de aves habitarán debajo de él, a la sombra de sus ramas habitarán.

Oseas 2:22

Y la tierra responderá al trigo, y al vino, y al aceite, y ellos responderán a Jezreel.

Oseas 6:2

Nos dará vida después de dos días; al tercer día nos resucitará y viviremos delante de Él.

Oseas 14:5

Yo seré a Israel como rocío; él florecerá como lirio, y extenderá sus raíces como el Líbano.

Zacarías 8:12

Porque habrá simiente de paz; la vid dará su fruto, y la tierra dará su producto, y los cielos darán su rocío; y haré que el remanente de este pueblo posea todo esto.

Juan 11:25

Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.

Juan 12:24

De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.

1 Corintios 15:36-38

Necio, lo que tú siembras no revive, si antes no muere.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)