22 Versículo de la Biblia sobre Considere su llamada a la salvación

Pues considerad, hermanos, vuestro llamamiento; no hubo muchos sabios conforme a la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles;

{es decir,} nosotros, a quienes también llamó, no sólo de entre los judíos, sino también de entre los gentiles.

Fiel es Dios, por medio de quien fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo, Señor nuestro.

Cada uno permanezca en la condición en que fue llamado.

Hermanos, cada uno permanezca con Dios en la condición en que fue llamado.

¿Fue llamado alguno {ya} circuncidado? Quédese circuncidado. ¿Fue llamado alguno estando incircuncidado? No se circuncide.

¿Fuiste llamado siendo esclavo? No te preocupes; aunque si puedes obtener tu libertad, prefiérelo.

Porque el que fue llamado por el Señor siendo esclavo, liberto es del Señor; de la misma manera, el que fue llamado siendo libre, esclavo es de Cristo.

Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; sólo que no {uséis} la libertad como pretexto para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.

Y que la paz de Cristo reine en vuestros corazones, a la cual en verdad fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos.

Esta persuasión no {vino} de aquel que os llama.

Me maravillo de que tan pronto hayáis abandonado al que os llamó por la gracia de Cristo, para {seguir} un evangelio diferente;

Yo, pues, prisionero del Señor, os ruego que viváis de una manera digna de la vocación con que habéis sido llamados,

para que anduvierais como es digno del Dios que os ha llamado a su reino y a su gloria.

Con este fin también nosotros oramos siempre por vosotros, para que nuestro Dios os considere dignos de vuestro llamamiento y cumpla todo deseo de bondad y la obra de fe, con poder,

Porque Dios no nos ha llamado a impureza, sino a santificación.

Pelea la buena batalla de la fe; echa mano de la vida eterna a la cual fuiste llamado, y {de la que} hiciste buena profesión en presencia de muchos testigos.

quien nos ha salvado y nos ha llamado con un llamamiento santo, no según nuestras obras, sino según su propósito y {según la} gracia que nos fue dada en Cristo Jesús desde la eternidad,

sino que así como aquel que os llamó es santo, así también sed vosotros santos en toda {vuestra} manera de vivir;

Porque para este propósito habéis sido llamados, pues también Cristo sufrió por vosotros, dejándoos ejemplo para que sigáis sus pisadas,

no devolviendo mal por mal, o insulto por insulto, sino más bien bendiciendo, porque fuisteis llamados con el propósito de heredar bendición.

Así que, hermanos, sed tanto más diligentes para hacer firme vuestro llamado y elección {de parte de Dios;} porque mientras hagáis estas cosas nunca tropezaréis;