33 Versículo de la Biblia sobre El ayuno, la naturaleza de
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Se levantó luego Esdras de delante de la Casa de Dios, y se fue a la cámara de Johanán hijo de Eliasib; e ido allá, no comió pan ni bebió agua, porque se entristeció sobre la prevaricación de los de la transmigración.
Y volví mi rostro al Señor Dios, buscándole en oración y ruego, en ayuno, cilicio, y ceniza.
Y venido el día, algunos de los judíos se juntaron, e hicieron voto bajo maldición, diciendo que ni comerían ni beberían hasta que hubieran matado a Pablo.
Y así hacía cada año; cuando subía a la Casa del SEÑOR, la otra la enojaba así; por lo cual ella lloraba, y no comía.
Luego el rey se fue a su palacio, y se acostó en ayuno; ni instrumentos de música fueron traídos delante de él, y el sueño huyó de él.
Sábado de sábados será a vosotros, y afligiréis vuestras almas, comenzando a los nueve del mes en la tarde; de tarde a tarde reposaréis vuestro sábado.
Entonces subieron todos los hijos de Israel, y todo el pueblo, y vinieron a la Casa de Dios; y lloraron, y se sentaron allí delante del SEÑOR, y ayunaron aquel día hasta la tarde; y sacrificaron holocaustos y pacíficos delante del SEÑOR.
Y lloraron y lamentaron, y ayunaron hasta la tarde, por Saúl y por Jonatán su hijo, y por el pueblo del SEÑOR, y por la casa de Israel; porque habían caído a espada.
Y tomando sus huesos, los sepultaron debajo de un árbol en Jabes, y ayunaron siete días.
se levantaron todos los hombres valientes, y tomaron el cuerpo de Saúl, y los cuerpos de sus hijos, y los trajeron a Jabes; y enterraron sus huesos debajo del alcornoque en Jabes, y ayunaron siete días.
Entonces rogó David a Dios por el niño; y ayunó David, y vino, y pasó la noche acostado en tierra. Y levantándose los ancianos de su casa fueron a él para hacerlo levantar de la tierra; mas él no quiso, ni comió con ellos pan. Y al séptimo día murió el niño; pero sus siervos no osaban hacerle saber que el niño había muerto, diciendo entre sí: Cuando el niño aun vivía, le hablábamos, y no quería oír nuestra voz; ¿pues cuánto más mal le hará, si le dijéremos que el niño ha muerto?Leer más.
Mas David viendo a sus siervos hablar entre sí, entendió que el niño había muerto; por lo que dijo David a sus siervos: ¿Ha muerto el niño? Y ellos respondieron: Ha muerto. Entonces David se levantó de tierra, y se lavó y se ungió, y mudó sus ropas, y entró a la Casa del SEÑOR, y adoró. Y después vino a su casa, y demandó, y le pusieron pan, y comió.
Y él estuvo allí con el SEÑOR cuarenta días y cuarenta noches; no comió pan, ni bebió agua; y escribió en tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos.
Se levantó, pues, y comió y bebió; y caminó con la fortaleza de aquella comida cuarenta días y cuarenta noches, hasta el monte de Dios, Horeb.
Y habiendo ayunado cuarenta días y cuarenta noches, después tuvo hambre.
por cuarenta días, y era tentado del diablo. Y no comió nada en aquellos días; los cuales pasados, después tuvo hambre.
Esto tendréis por estatuto perpetuo: En el mes séptimo, a los diez del mes, afligiréis vuestras almas, y ninguna obra haréis, ni el natural ni el extranjero que peregrina entre vosotros. Porque en este día se os reconciliará para limpiaros; y seréis limpios de todos vuestros pecados delante del SEÑOR. Sábado de reposo será para vosotros, y afligiréis vuestras almas, por estatuto perpetuo.
Y habló el SEÑOR a Moisés, diciendo: Pero a los diez de este mes séptimo será el día de las reconciliaciones; tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas, y ofreceréis ofrenda encendida al SEÑOR. Ninguna obra haréis en este mismo día; porque es día de reconciliaciones, para reconciliaros delante del SEÑOR vuestro Dios.Leer más.
Porque toda persona que no se afligiere en este mismo día, será cortada de su pueblo. Y cualquier persona que hiciere obra alguna en este mismo día, yo destruiré la tal persona de entre su pueblo. Ninguna obra haréis; estatuto perpetuo será por vuestras edades en todas vuestras habitaciones. Sábado de sábados será a vosotros, y afligiréis vuestras almas, comenzando a los nueve del mes en la tarde; de tarde a tarde reposaréis vuestro sábado.
Y en el diez de este mes séptimo tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas; ninguna obra haréis;
Y pasado mucho tiempo, y siendo ya peligrosa la navegación, porque ya era pasado el ayuno, Pablo amonestaba,
Así dijo el SEÑOR de los ejércitos: El ayuno del cuarto mes, y el ayuno del quinto, y el ayuno del séptimo, y el ayuno del décimo, se tornarán a la Casa de Judá en gozo y alegría, y en festivas solemnidades. Amad, pues, la Verdad y la Paz.
cuando fue enviado a la Casa de Dios, Sarezer, con Regem-melec y sus hombres, a implorar el favor del SEÑOR, y a preguntar a los sacerdotes que estaban en la casa del SEÑOR de los ejércitos, y a los profetas, diciendo: ¿Lloraremos en el mes quinto? ¿Haremos abstinencia como hemos hecho ya algunos años? Vino, pues, a mí palabra del SEÑOR de los ejércitos, diciendo:Leer más.
Habla a todo el pueblo del país, y a los sacerdotes, diciendo: Cuando ayunasteis y llorasteis en el quinto y en el séptimo mes estos setenta años, ¿habéis ayunado para mí?
El fariseo, en pie, oraba consigo de esta manera: Dios, te doy gracias, que no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; ayuno lo de dos comidas cada sábado, doy diezmos de todo lo que poseo.
Entonces él tuvo temor; y puso Josafat su rostro para consultar al SEÑOR, e hizo pregonar ayuno a todo Judá.
Pero los varones de Israel fueron puestos en apuro aquel día; porque Saúl había conjurado al pueblo, diciendo: Cualquiera que comiere pan hasta la tarde, hasta que haya tomado venganza de mis enemigos, sea maldito. Y todo el pueblo no había gustado pan.
Mas el varón de Dios dijo al rey: Si me dieras la mitad de tu casa, no iría contigo, ni comería pan ni bebería agua en este lugar; porque así me está mandado por palabra del SEÑOR, diciendo: No comas pan, ni bebas agua, ni vuelvas por el camino que fueres.
Y las cartas que escribió decían así: Proclamad ayuno, y poned a Nabot a la cabecera del pueblo;
Y aconteció en el año quinto de Joacim hijo de Josías, rey de Judá, en el mes noveno, que promulgaron ayuno en la presencia del SEÑOR, a todo el pueblo de Jerusalén, y a todo el pueblo que venía de las ciudades de Judá a Jerusalén.
Cuando comenzó a ser de día, Pablo exhortaba a todos que comieran, diciendo: Este es el decimocuarto día que esperáis y permanecéis en ayunas, no comiendo nada.
en azotes, en cárceles, en alborotos, en trabajos, en vigilias, en ayunos;
en trabajo y fatiga, en muchas vigilias, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez;
Y fue que, cuando yo oí estas palabras, me senté y lloré, y me enluté por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos.
y era viuda hacía ochenta y cuatro años, que no se apartaba del Templo, sirviendo de noche y de día con ayunos y oraciones.