14 Versículo de la Biblia sobre El acaparamiento
Versículos Más Relevantes
Hay quien reparte, y le es añadido más, y hay quien retiene lo que es justo, sólo para venir a menos.
Hay un grave mal {que} he visto bajo el sol: las riquezas guardadas por su dueño para su mal;
Porque donde esté vuestro tesoro, allí también estará vuestro corazón.
Porque nada hemos traído al mundo, así que nada podemos sacar de él.
Pero los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo y en muchos deseos necios y dañosos que hunden a los hombres en la ruina y en la perdición. Porque la raíz de todos los males es el amor al dinero, por el cual, codiciándolo algunos, se extraviaron de la fe y se torturaron con muchos dolores.
Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una propiedad, y se quedó con {parte} del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo la otra parte, la puso a los pies de los apóstoles.
No saben hacer lo recto --declara el SEÑOR-- los que acumulan violencia y destrucción en sus palacios.
No os acumuléis tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre destruyen, y donde ladrones penetran y roban;
Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, ve {y} vende lo que posees y da a los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sígueme.
Vended vuestras posesiones y dad limosnas; haceos bolsas que no se deterioran, un tesoro en los cielos que no se agota, donde no se acerca {ningún} ladrón ni la polilla destruye.
Al que retiene el grano, el pueblo lo maldecirá, pero habrá bendición sobre la cabeza del que {lo} vende.
Aunque amontone plata como polvo, y prepare vestidos {abundantes} como el barro; él {los} puede preparar, pero el justo {los} vestirá, y el inocente repartirá la plata.
No niegues el bien a quien se le debe, cuando esté en tu mano el hacer{lo.}
¿Oíd ahora, ricos! Llorad y aullad por las miserias que vienen sobre vosotros. Vuestras riquezas se han podrido y vuestras ropas están comidas de polilla. Vuestro oro y vuestra plata se han oxidado, su herrumbre será un testigo contra vosotros y consumirá vuestra carne como fuego. Es en los últimos días que habéis acumulado tesoros.