36 Versículo de la Biblia sobre las intenciones
Versículos Más Relevantes
Todos los caminos del hombre son limpios ante sus propios ojos, pero el SEÑOR sondea los espíritus.
Todo camino del hombre es recto ante sus ojos, pero el SEÑOR sondea los corazones.
Por tanto, no juzguéis antes de tiempo, {sino esperad} hasta que el Señor venga, el cual sacará a la luz las cosas ocultas en las tinieblas y también pondrá de manifiesto los designios de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de parte de Dios.
¿Entonces qué? Que de todas maneras, ya sea fingidamente o en verdad, Cristo es proclamado; y en esto me regocijo, sí, y me regocijaré.
Pedís y no recibís, porque pedís con malos propósitos, para gastar{lo} en vuestros placeres.
Examíname, oh SEÑOR, y pruébame; escudriña mi mente y mi corazón.
Del hombre son los propósitos del corazón, mas del SEÑOR es la respuesta de la lengua.
sino que así como hemos sido aprobados por Dios para que se nos confiara el evangelio, así hablamos, no como agradando a los hombres, sino a Dios que examina nuestros corazones.
Pues no somos como muchos, que comercian con la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios {y} delante de Dios hablamos en Cristo.
Algunos, a la verdad, predican a Cristo aun por envidia y rivalidad, pero también otros {lo hacen} de buena voluntad;
la obra de cada uno se hará evidente; porque el día la dará a conocer, pues con fuego {será} revelada; el fuego mismo probará la calidad de la obra de cada uno.
ruego, pues, que cuando esté presente, no tenga que ser osado con la confianza con que me propongo proceder resueltamente contra algunos que nos consideran como si anduviéramos según la carne.
Yo, el SEÑOR, escudriño el corazón, pruebo los pensamientos, para dar a cada uno según sus caminos, según el fruto de sus obras.
Pues nuestra exhortación no {procede} de error ni de impureza ni {es} con engaño;
Tú has probado mi corazón, {me} has visitado de noche; me has puesto a prueba y nada hallaste; he resuelto que mi boca no peque.
aquéllos proclaman a Cristo por ambición personal, no con sinceridad, pensando causarme angustia en mis prisiones.
{Como} aguas profundas es el consejo en el corazón del hombre, y el hombre de entendimiento lo sacará.
Por tanto, conociendo el temor del Señor, persuadimos a los hombres, pero a Dios somos manifiestos, y espero que también seamos manifiestos en vuestras conciencias.
¿no habéis hecho distinciones entre vosotros mismos, y habéis venido a ser jueces con malos pensamientos?
El sacrificio de los impíos es abominación, cuánto más trayéndolo con mala intención.
Porque entre los hombres, ¿quién conoce los {pensamientos} de un hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Asimismo, nadie conoce los {pensamientos} de Dios, sino el Espíritu de Dios.
Sabiendo yo, Dios mío, que tú pruebas el corazón y te deleitas en la rectitud, yo he ofrecido voluntariamente todas estas {cosas} en la integridad de mi corazón; y ahora he visto con alegría a tu pueblo, que está aquí, hacer {sus} ofrendas a ti voluntariamente.
No os jactéis más con tanto orgullo, no salga la arrogancia de vuestra boca; porque el SEÑOR es Dios de sabiduría, y por El son pesadas las acciones.
Porque Dios traerá toda obra a juicio, junto con todo lo oculto, sea bueno o sea malo.
Lámpara del SEÑOR es el espíritu del hombre que escudriña lo más profundo de su ser.
Pero el SEÑOR dijo a Samuel: No mires a su apariencia, ni a lo alto de su estatura, porque lo he desechado; pues Dios ve no como el hombre ve, pues el hombre mira la apariencia exterior, pero el SEÑOR mira el corazón.
¿Quién puede discernir {sus propios} errores? Absuélveme de los {que me son} ocultos.
Falsedad habla cada uno a su prójimo; hablan con labios lisonjeros y con doblez de corazón.
Si dices: Mira, no sabíamos esto. ¿No {lo} tiene en cuenta el que sondea los corazones? ¿No lo sabe el que guarda tu alma? ¿No dará a cada hombre según su obra?
Ellos os tienen celo, no con buena intención, sino que quieren excluiros a fin de que mostréis celo por ellos.
Porque como sabéis, nunca fuimos a {vosotros} con palabras lisonjeras, ni con pretexto para lucrar, Dios es testigo,
En cuanto a ti, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele de todo corazón y con ánimo dispuesto; porque el SEÑOR escudriña todos los corazones, y entiende todo intento de los pensamientos. Si le buscas, El te dejará encontrarle; pero si le abandonas, El te rechazará para siempre.
Pues aunque andamos en la carne, no luchamos según la carne;
Acabe la maldad de los impíos, mas establece tú al justo, pues el Dios justo prueba los corazones y las mentes.
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