44 Versículo de la Biblia sobre confiar en los demás
Versículos Más Relevantes
No os fiéis del vecino, ni confiéis en el amigo. De la que reposa en tu seno, guarda tus labios.
Y si no habéis sido fieles en {el uso de} lo ajeno, ¿quién os dará lo que es vuestro?
No confiéis en príncipes, {ni} en hijo de hombre en quien no hay salvación.
Algunos {confían} en carros, y otros en caballos; mas nosotros en el nombre del SEÑOR nuestro Dios confiaremos.
Refirió también esta parábola a unos que confiaban en sí mismos como justos, y despreciaban a los demás:
Si he puesto {en} el oro mi confianza, y he dicho al oro fino: {Tú eres} mi seguridad;
Guárdese cada uno de su prójimo, y no confíe en ningún hermano; porque todo hermano obra con engaño, y todo prójimo anda calumniando.
En ti pondrán su confianza los que conocen tu nombre, porque tú, oh SEÑOR, no abandonas a los que te buscan.
He aquí el hombre que no quiso hacer de Dios su refugio, sino que confió en la abundancia de sus riquezas {y} se hizo fuerte en sus {malos} deseos.
Así dice el SEÑOR: Maldito el hombre que en el hombre confía, y hace de la carne su fortaleza, y del SEÑOR se aparta su corazón.
No confiéis en la opresión, ni en el robo pongáis vuestra esperanza; si las riquezas aumentan, no pongáis el corazón {en ellas}.
Bendito es el hombre que confía en el SEÑOR, cuya confianza es el SEÑOR.
para que vuestra fe no descanse en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.
Confiad en El en todo tiempo, oh pueblo; derramad vuestro corazón delante de El; Dios es nuestro refugio. (Selah)
El que confía en su propio corazón es un necio, pero el que anda con sabiduría será librado.
No se turbe vuestro corazón; creed en Dios, creed también en mí.
Pero Jesús, por su parte, no se confiaba a ellos, porque conocía a todos,
Los que teméis al SEÑOR, confiad en el SEÑOR; El es vuestra ayuda y vuestro escudo.
El SEÑOR está a mi favor; no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?
Diré yo al SEÑOR: Refugio mío y fortaleza mía, mi Dios, en quien confío.
El temor al hombre es un lazo, pero el que confía en el SEÑOR estará seguro.
Probad y ved que el SEÑOR es bueno. ¿Cuán bienaventurado es el hombre que en El se refugia!
De hecho, dentro de nosotros mismos {ya} teníamos la sentencia de muerte, a fin de que no confiáramos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos,
Confía en el SEÑOR con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento.
Pues la Escritura dice: TODO EL QUE CREE EN EL NO SERA AVERGONZADO.
Muchos hombres proclaman su propia lealtad, pero un hombre digno de confianza, ¿quién lo hallará?
En ella confía el corazón de su marido, y no carecerá de ganancias.
El hombre arrogante suscita rencillas, mas el que confía en el SEÑOR prosperará.
Aunque El me mate, en El esperaré; pero defenderé mis caminos delante de El.
``{Dios} no confía ni aún en sus propios siervos; y a sus ángeles atribuye errores.
El que es fiel en lo muy poco, es fiel también en lo mucho; y el que es injusto en lo muy poco, también es injusto en lo mucho.
aunque yo mismo podría confiar también en la carne. Si algún otro cree {tener motivo para} confiar en la carne, yo mucho más:
No temerá {recibir} malas noticias; su corazón está firme, confiado en el SEÑOR.
Confió en el SEÑOR, Dios de Israel; y después de él, no hubo ninguno como él entre todos los reyes de Judá, ni {entre los} que fueron antes de él,
Con él está {sólo} un brazo de carne, pero con nosotros está el SEÑOR nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas. Y el pueblo confió en las palabras de Ezequías, rey de Judá.
Dejad de considerar al hombre, cuyo soplo {de vida} está en su nariz; pues ¿en qué ha de ser él estimado?
Dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: He aquí, castigaré a Amón de Tebas, a Faraón y a Egipto junto con sus dioses y sus reyes; a Faraón y a los que en él confían.
Porque también tus hermanos y la casa de tu padre, también ellos te han traicionado, también ellos han dado gritos en pos de ti; no les creas aunque te digan cosas agradables.
Confía en el SEÑOR, y haz el bien; habita en la tierra, y cultiva la fidelidad.
sino que así como hemos sido aprobados por Dios para que se nos confiara el evangelio, así hablamos, no como agradando a los hombres, sino a Dios que examina nuestros corazones.
Y el Dios de la esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo.
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