Dios hace habitar en familia a los solitarios; Él saca a los aprisionados con grillos; mas los rebeldes habitan en tierra seca.

Porque aun tus hermanos y la casa de tu padre, aun ellos se levantaron contra ti, aun ellos dieron voces en pos de ti. No les creas, cuando bien te hablen.

(Porque el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?).

Y los enemigos del hombre serán los de su propia casa.

Y si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.

Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos; y mayormente a los de la familia de la fe.

El que turba su casa heredará viento; y el necio será siervo del sabio de corazón.

Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y de la familia de Dios;

que gobierne bien su propia casa, que tenga sus hijos en sujeción con toda honestidad

Y si una casa está dividida contra sí misma, tal casa no puede permanecer.

Porque de aquí en adelante cinco en una casa estarán divididos; tres contra dos, y dos contra tres.

de quien es nombrada toda la familia en el cielo y en la tierra,

Y ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú, y tu casa.

Se acordarán, y se volverán a Jehová todos los términos de la tierra; y adorarán delante de ti todas las familias de las naciones.

Y bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré: y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.

Después miré, y me levanté, y dije a los principales y a los magistrados, y al resto del pueblo: No temáis delante de ellos: acordaos del Señor grande y terrible, y pelead por vuestros hermanos, por vuestros hijos y por vuestras hijas, por vuestras esposas y por vuestras casas.

Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?

Pero si alguna viuda tuviere hijos, o nietos, aprendan éstos primero a ser piadosos en casa, y a recompensar a sus padres; porque esto es bueno y agradable delante de Dios.

A vosotros solamente he conocido de todas las familias de la tierra; por tanto visitaré contra vosotros todas vuestras maldades.

Honrad a todos. Amad la hermandad. Temed a Dios. Honrad al rey.

Porque el marido es cabeza de la esposa, así como Cristo es cabeza de la iglesia; y Él es el Salvador del cuerpo.

Porque el que santifica y los que son santificados, de uno son todos; por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos,

a los cuales es preciso tapar la boca, que trastornan casas enteras, enseñando por ganancia deshonesta lo que no conviene.

Hablad a toda la congregación de Israel, diciendo: En el diez de este mes tómese cada uno un cordero por las familias de sus padres, un cordero por familia.

Y acontecerá que los de las familias de la tierra que no subieren a Jerusalén a adorar al Rey, Jehová de los ejércitos, no vendrá sobre ellos lluvia.

Se levanta aun de noche, y da comida a su familia, y ración a sus criadas.

El pequeño vendrá a ser mil, el menor, una nación fuerte. Yo Jehová, a su tiempo lo apresuraré.

Y Jehová dijo a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca porque a ti he visto justo delante de mí en esta generación.

Mas Jesús les dijo: No hay profeta sin honra sino en su tierra, y entre sus parientes, y en su casa.