'Él' en la Biblia
Y la sembraré para mí en la tierra, y tendré misericordia de la que no ha obtenido misericordia; y diré al que no era mi pueblo: Tú eres mi pueblo, y él dirá: Tú eres mi Dios.
Tal será el pueblo como el sacerdote: y visitaré sobre él sus caminos, y le pagaré conforme a sus obras.
Y verá Efraín su enfermedad, y Judá su llaga; irá entonces Efraín a Asiria, y enviará al rey Jareb; mas él no os podrá sanar, ni os curará la llaga.
Venid y volvámonos a Jehová; porque Él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará.
Nos dará vida después de dos días; al tercer día nos resucitará y viviremos delante de Él.
Comieron extraños su sustancia, y él no lo supo; y aun vejez se ha esparcido por él, y él no lo entendió.
Y la soberbia de Israel testificará contra él en su cara; y con todo esto, no se volvieron a Jehová su Dios, ni lo buscaron.
No darán ofrendas de vino a Jehová, ni Él se agradará de ellos; sus sacrificios, como pan de enlutados les serán a ellos; todos los que comieren de él, serán inmundos. Será, pues, el pan de ellos para sí mismos; no entrará en la casa de Jehová.
Su corazón está dividido. Ahora serán hallados culpables; Él quebrantará sus altares, asolará sus imágenes.
Por las becerras de Betaven serán atemorizados los moradores de Samaria; porque su pueblo lamentará a causa del becerro, y sus sacerdotes que en él se regocijaban por su gloria, la cual será disipada.
Y aun será él llevado a Asiria como presente al rey Jareb: Efraín será avergonzado, e Israel se avergonzará de su propio consejo.
En pos de Jehová caminarán; Él rugirá como león; cual león rugirá Él de cierto, y los hijos se moverán azorados del occidente.
Efraín ha provocado a Dios con amarguras; por tanto, su sangre se derramará sobre él, y su Señor le pagará su oprobio.
Aunque él fructifique entre sus hermanos, vendrá el solano, viento de Jehová, subiendo de la parte del desierto, y se secará su manantial, y se agotará su fuente; él saqueará el tesoro de todos los vasos preciosos.
Yo seré a Israel como rocío; él florecerá como lirio, y extenderá sus raíces como el Líbano.
Efraín dirá: ¿Qué más tendré ya con los ídolos? Yo lo oiré, y miraré; yo seré a él como el ciprés verde; de mí será hallado tu fruto.