'Caldeos' en la Biblia
`Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: ``Yo haré volver atrás las armas de guerra que ustedes tienen en sus manos, con las cuales pelean contra el rey de Babilonia y contra los Caldeos que los sitian fuera de los muros, y las reuniré en medio de esta ciudad.
"El que se quede en esta ciudad morirá a espada, de hambre y de pestilencia; pero el que salga y se entregue a los Caldeos que los sitian, vivirá, y tendrá su propia vida como botín.
``Te entregaré en manos de los que buscan tu vida, sí, en manos de los que temes: en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y en manos de los Caldeos.
``Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `Como a estos higos buenos, así consideraré como buenos a los desterrados de Judá que Yo he echado de este lugar a la tierra de los Caldeos.
~`Después que se hayan cumplido los setenta años, castigaré al rey de Babilonia y a esa nación por su iniquidad,' declara el SEÑOR, `y a la tierra de los Caldeos la haré una desolación eterna.
y Sedequías, rey de Judá, no escapará de la mano de los Caldeos, sino que ciertamente será entregado en manos del rey de Babilonia que hablará con él cara a cara, y sus ojos verán sus ojos;
y Nabucodonosor llevará a Sedequías a Babilonia, y allí estará hasta que Yo lo visite," declara el SEÑOR, ``y si ustedes pelean contra los Caldeos, no tendrán éxito"'?"
~`Los terraplenes de asalto han llegado a la ciudad para tomarla. La ciudad va a ser entregada en manos de los Caldeos que pelean contra ella, por causa de la espada, el hambre y la pestilencia. Lo que habías hablado ha venido a ser, y Tú {lo} estás viendo.
~`Tú me has dicho, oh Señor DIOS: ``Cómprate el campo con dinero, y llama testigos"; aunque la ciudad sea entregada en manos de los Caldeos.'"
Por tanto, así dice el SEÑOR: ``Voy a entregar esta ciudad en mano de los Caldeos y en mano de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y él la tomará.
"Los Caldeos que atacan esta ciudad entrarán y prenderán fuego a la ciudad y la quemarán, junto con las casas en las que han ofrecido incienso a Baal sobre sus terrazas y han derramado libaciones a otros dioses para provocarme a ira.
~`Y se comprarán campos en esta tierra de la cual ustedes dicen: ``Es una desolación, sin hombres ni animales; entregada está en mano de los Caldeos."
~`Mientras {ellos} vienen a pelear contra los Caldeos que llenarán {la ciudad} con los cadáveres de los hombres que herí en Mi ira y en Mi furor, pues Yo había escondido Mi rostro de esta ciudad a causa de toda su maldad.
"Pero sucedió que cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, subió contra la tierra, dijimos: `Vengan y huyamos a Jerusalén ante el ejército de los Caldeos y ante el ejército de los Arameos.' Por eso habitamos en Jerusalén."
Entretanto, el ejército de Faraón había salido de Egipto, y cuando los Caldeos que tenían sitiada a Jerusalén oyeron la noticia acerca de ellos, levantaron el {sitio} de Jerusalén.
"Y los Caldeos volverán y pelearán contra esta ciudad, la capturarán y le prenderán fuego."'
``Así dice el SEÑOR: `No se engañen, diciendo: ``Ciertamente los Caldeos se apartarán de nosotros," porque no se apartarán.
~`Pues aunque ustedes hubieran derrotado a todo el ejército de los Caldeos que peleaba contra ustedes, y {sólo} quedaran heridos entre ellos, se levantaría cada uno en su tienda, y prenderían fuego a esta ciudad.'"
Y cuando el ejército de los Caldeos levantó {el sitio} de Jerusalén por causa del ejército de Faraón,
Estando él a la Puerta de Benjamín, {había} allí un capitán de la guardia que se llamaba Irías, hijo de Selemías, hijo de Hananías, el cual apresó al profeta Jeremías, diciéndole: ``Tú vas a pasarte a los Caldeos."
Pero Jeremías dijo: `` ¡No es verdad! No voy a pasarme a los Caldeos." Sin embargo él no le hizo caso. Apresó, pues, a Jeremías y lo llevó a los oficiales.
``Así dice el SEÑOR: `El que se quede en esta ciudad morirá a espada, de hambre o de pestilencia, pero el que se pase a los Caldeos, vivirá y tendrá su vida por botín y seguirá viviendo.'
~`Pero si usted no se pasa a los oficiales del rey de Babilonia, entonces esta ciudad será entregada en manos de los Caldeos; y ellos la incendiarán y usted no escapará de su mano.'"
Entonces el rey Sedequías respondió a Jeremías: ``Tengo temor de los Judíos que se han pasado a los Caldeos, no sea que me entreguen en sus manos y me maltraten."
`Todas sus mujeres y sus hijos serán llevados a los Caldeos. Tampoco usted escapará de sus manos, sino que será apresado por la mano del rey de Babilonia, y esta ciudad será incendiada.'"
Pero el ejército de los Caldeos los persiguió, y alcanzaron a Sedequías en los llanos de Jericó; lo apresaron y lo llevaron a Ribla en la tierra de Hamat, donde Nabucodonosor, rey de Babilonia, dictó sentencia contra él.
Los Caldeos prendieron fuego al palacio del rey y a las casas del pueblo y derribaron los muros de Jerusalén.
Entonces Gedalías, hijo de Ahicam, hijo de Safán, les juró a ellos y a sus hombres: ``No teman servir a los Caldeos; quédense en la tierra y sirvan al rey de Babilonia, y les irá bien.
"Así que, por mi parte, yo me quedaré en Mizpa para estar {en lugar de ustedes} delante de los Caldeos que vengan a nosotros. Pero en cuanto a ustedes, recojan vino y frutos de verano y aceite, y guárden{los} en sus vasijas, y habiten en las ciudades que han tomado."
Ismael mató también a todos los Judíos que estaban con él, {es decir,} con Gedalías, en Mizpa, y a los hombres de guerra Caldeos que se encontraban allí.
a causa de los Caldeos, porque les temían, ya que Ismael, hijo de Netanías, había matado a Gedalías, hijo de Ahicam, a quien el rey de Babilonia había puesto para gobernar el país.
sino que Baruc, hijo de Nerías, te provoca contra nosotros para entregarnos en mano de los Caldeos, a fin de que nos maten o nos deporten a Babilonia."
La palabra que el SEÑOR habló acerca de Babilonia, la tierra de los Caldeos, por medio del profeta Jeremías:
Huyan de en medio de Babilonia, Y salgan de la tierra de los Caldeos; Sean como machos cabríos al frente del rebaño.
El SEÑOR ha abierto Su arsenal Y ha sacado las armas de Su indignación, Porque ésta es obra del Señor, DIOS de los ejércitos, En la tierra de los Caldeos.
Espada contra los Caldeos," declara el SEÑOR, ``y contra los habitantes de Babilonia, Contra sus oficiales y sus sabios.
Por tanto, oigan el plan que el SEÑOR ha trazado contra Babilonia, y los designios que ha decretado contra la tierra de los Caldeos; ciertamente los arrastrarán, {aun} a los más pequeños del rebaño; ciertamente a causa de ellos hará una desolación de su pastizal (redil).
Caerán muertos en la tierra de los Caldeos, Y traspasados en sus calles."
¡Clamor de gritos desde Babilonia, Y de gran destrucción de la tierra de los Caldeos!
se abrió una brecha en la ciudad, y todos los hombres de guerra huyeron y salieron de la ciudad de noche por el camino de la puerta entre los dos muros que {había} junto al jardín del rey, a pesar de que los Caldeos {estaban} alrededor de la ciudad, y se fueron por el camino del Arabá (del Valle del Jordán).
Pero el ejército de los Caldeos persiguió al rey y alcanzó a Sedequías en los llanos de Jericó, y todo su ejército se dispersó de su lado.
Y todo el ejército de los Caldeos que {estaba} con el capitán de la guardia derribó todas las murallas alrededor de Jerusalén.
Los Caldeos rompieron en pedazos las columnas de bronce que {estaban} en la casa del SEÑOR, también las basas y el mar de bronce que {estaban} en la casa del SEÑOR, y llevaron todo su bronce a Babilonia.