'Canas' en la Biblia
Pero Jacob dijo: Mi hijo no descenderá con vosotros; pues su hermano ha muerto, y {me} queda sólo él. Si algo malo le acontece en el viaje en que vais, haréis descender mis canas con dolor al Seol.
``Y si también os lleváis a éste de mi presencia, y algo malo le sucede, haréis descender mis canas con dolor al Seol."
sucederá que cuando él vea que el muchacho no está {con nosotros,} morirá. Así pues, tus siervos harán descender las canas de nuestro padre, tu siervo, con dolor al Seol.
``Delante de las canas te pondrás en pie; honrarás al anciano, y a tu Dios temerás; yo soy el SEÑOR.
Y he aquí, ahora el rey va delante de vosotros. Yo {ya} soy viejo y lleno de canas, y he aquí, mis hijos están con vosotros. Yo he andado delante de vosotros desde mi juventud hasta hoy.
Haz, pues, conforme a tu sabiduría, y no permitas que sus canas desciendan al Seol en paz.
Pero ahora, no lo dejes sin castigo, porque eres hombre sabio; sabrás lo que debes hacer con él y harás que desciendan sus canas con sangre al Seol.
Bajo los lotos se echa, en lo oculto de las cañas y del pantano.
Reprende las fieras de las cañas, la manada de toros con los becerros de los pueblos, pisoteando las piezas de plata; El ha dispersado a los pueblos que se deleitan en la guerra.
Y aun en la vejez y las canas, no me desampares, oh Dios, hasta que anuncie tu poder a {esta} generación, tu poderío a todos los que han de venir.
La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la honra de los ancianos, sus canas.
Las cañas junto al río, a orillas del Nilo, y todos los sembrados junto al Nilo se secarán, serán esparcidos, y no serán más.
La tierra abrasada se convertirá en laguna, y el secadal en manantiales de aguas; en la guarida de chacales, su lugar de descanso, la hierba se {convertirá en} cañas y juncos.
Midió el lado oriental con la caña de medir, {y tenía} alrededor quinientas cañas de la caña de medir.
Midió el lado norte con la caña de medir, {y tenía} alrededor quinientas cañas.
Al lado sur midió quinientas cañas con la caña de medir.
Se volvió al lado occidental {y} midió quinientas cañas con la caña de medir.
Por los cuatro lados lo midió; tenía un muro todo alrededor de quinientas {cañas} de largo y quinientas de ancho, para dividir entre lo sagrado y lo profano.