'Despojo' en la Biblia
El enemigo dijo: ``Perseguiré, alcanzaré, repartiré el despojo; se cumplirá mi deseo contra ellos; sacaré mi espada, los destruirá mi mano."
Y llevaron cautivas los hijos de Israel a las mujeres de los madianitas, y sus chiquitos y tomaron el despojo de sus bestias, de todos sus ganados, y de toda su hacienda.
Y tomaron todo el despojo, y toda la presa, así de hombres como de bestias.
Y el botín que quedó del despojo que los hombres de guerra habían tomado fue de seiscientas setenta y cinco mil ovejas,
Los hombres del ejército habían tomado despojo, cada uno para sí.
Solamente tomamos para nosotros el ganado, y el despojo de las ciudades que habíamos tomado.
Y tomamos para nosotros todo el ganado, y el despojo de las ciudades.
Y juntarás todo el despojo de ella en medio de su plaza, y consumirás con fuego la ciudad y todo su despojo, todo ello, al SEÑOR tu Dios: y será un montón para siempre; nunca más se edificará.
Solamente las mujeres y los niños, y los animales, y todo lo que hubiere en la ciudad, todos sus despojos, tomarás para ti; y comerás del despojo de tus enemigos, los cuales el SEÑOR tu Dios te entregó.
Que vi entre el despojo un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos; lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido debajo de tierra en el medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello.
E Israel tomó para sí, sólo las bestias y el despojo de la ciudad, conforme a la palabra de Jehová que Él había mandado a Josué.
Y los hijos de Israel tomaron para sí todo el despojo y el ganado de estas ciudades; pero a todos los hombres metieron a espada hasta destruirlos, sin dejar nada que respirase.
Y les habló, diciendo: Volveos a vuestras tiendas con grandes riquezas, y con gran copia de ganado, con plata, oro, bronce, y hierro, y muchos vestidos; repartid con vuestros hermanos el despojo de vuestros enemigos.
¿Acaso no han hallado despojo, y lo están repartiendo? A cada uno una doncella, o dos; las prendas de colores para Sísara, las prendas bordadas de colores; la ropa de color bordada de ambos lados, para los cuellos de los que han tomado el despojo.
Y les dijo Gedeón: Deseo haceros una petición, que cada uno me dé los zarcillos de su despojo. (Porque traían zarcillos de oro, que eran ismaelitas.)
Y ellos respondieron: De buena gana los daremos. Y tendiendo una ropa de vestir, echó allí cada uno los zarcillos de su despojo.
Y el Espíritu de Jehová cayó sobre él, y descendió a Ascalón, e hirió treinta hombres de ellos; y tomando el despojo, dio las mudas de ropa a los que habían explicado el enigma; y encendido en enojo se fue a casa de su padre.
¿Cuánto más si el pueblo hubiera hoy comido del despojo de sus enemigos que halló? ¿No se habría hecho ahora mayor estrago en los filisteos?
Se lanzó, por tanto, el pueblo al despojo, y tomaron ovejas y vacas y becerros, y los mataron en tierra, y el pueblo comió con sangre.
Entonces Saúl dijo: Descendamos contra los filisteos de noche, tomemos despojo de entre ellos hasta el amanecer, y no dejemos {ni} uno de ellos. Y ellos dijeron: Haz lo que te parezca bien. Entonces el sacerdote dijo: Acerquémonos a Dios aquí.
¿Por qué, pues, no has oído la voz del SEÑOR? Antes vuelto al despojo, has hecho lo malo en los ojos del SEÑOR.
Mas el pueblo tomó del despojo ovejas y vacas, las primicias del anatema, para sacrificarlas al SEÑOR tu Dios en Gilgal.
Y él también se despojó de sus vestidos, y profetizó también delante de Samuel, y cayó desnudo todo aquel día y toda aquella noche. De aquí se dijo: ¿También Saúl entre los profetas?
Entonces todos los hombres perversos, de Belial, de entre los que habían ido con David, respondieron y dijeron: Porque no fueron con nosotros, no les daremos del despojo que hemos quitado, sino a cada uno su esposa y sus hijos; para que se los lleven y se vayan.
Y cuando David llegó a Siclag, envió el despojo a los ancianos de Judá, sus amigos, diciendo: He aquí un presente para vosotros, del despojo de los enemigos de Jehová.
de los sirios, de los moabitas, de los amonitas, de los filisteos, de los amalecitas, y del despojo de Hadad-ezer hijo de Rehob, rey de Soba.
Y tomó la corona de su rey de su cabeza, la cual pesaba un talento de oro, y tenía piedras preciosas; y fue puesta sobre la cabeza de David. Y trajo muy grande despojo de la ciudad.
Este, levantándose, hirió a los filisteos, hasta que su mano se cansó, y quedó pegada su mano a la espada. Aquel día el SEÑOR hizo gran salvación; y se volvió el pueblo en pos de él solamente a tomar el despojo.
Entonces dijeron: Esto es sangre; sin duda los reyes han peleado entre sí, y se han matado unos a otros. Ahora pues, ¡Moab, al despojo!
Y desampararé el remanente de mi heredad, y las entregaré en manos de sus enemigos; y serán para presa y para despojo a todos sus adversarios;
Y David tomó la corona de su rey de encima de su cabeza, y la halló de peso de un talento de oro, y había en ella piedras preciosas; y fue puesta sobre la cabeza de David.Y además de esto sacó de la ciudad un muy gran despojo.
Y Asa, y el pueblo que con él estaba, los siguió hasta Gerar; y cayeron los etíopes hasta no quedar en ellos hombre con vida; porque fueron deshechos delante del SEÑOR y de su ejército. Y les tomaron muy grande despojo.
E hirieron todas las ciudades alrededor de Gerar, porque el terror del SEÑOR era sobre ellos; y saquearon todas las ciudades, porque había en ellas gran despojo.
Y viniendo Josafat y su pueblo a despojarlos, hallaron en ellos muchas riquezas, y cuerpos muertos, y vestidos y vasos preciosos, los cuales tomaron para sí, tantos, que no los podían llevar; tres días duró el despojo, porque era mucho.
Y sucedió que a la vuelta del año subió contra él el ejército de Siria; y vinieron a Judá y a Jerusalén, y destruyeron en el pueblo a todos los principales de él, y enviaron todo el despojo al rey a Damasco.
Pero los del escuadrón que Amasías había despedido, para que no fueran con él a la guerra, se derramaron sobre las ciudades de Judá, desde Samaria hasta Bet-horón, e hirieron de ellos tres mil, y tomaron un gran despojo.
Tomaron también cautivos los hijos de Israel de sus hermanos doscientos mil, mujeres, hijos e hijas, a más de haber saqueado de ellos un gran despojo, el cual trajeron a Samaria.
Entonces el ejército dejó los cautivos y el despojo delante de los príncipes y de toda la multitud.
Y se levantaron los varones nombrados, y tomaron los cautivos, y vistieron del despojo a los que de ellos estaban desnudos; los vistieron y los calzaron, y les dieron de comer y de beber, y los ungieron, y condujeron en asnos a todos los flacos, y los llevaron hasta Jericó, la ciudad de las palmas, cerca de sus hermanos; y ellos volvieron a Samaria.
Aunque despojó Acaz la Casa del SEÑOR, y la casa real, y las de los príncipes, para dar al rey de los asirios, con todo eso él no le ayudó.
Oye, oh Dios nuestro, que somos en menosprecio, y vuelve el baldón de ellos sobre su cabeza, y dalos en despojo en la tierra de su cautiverio.
Y fueron enviadas cartas por mano de los correos a todas las provincias del rey, para destruir, matar, y echar a perder a todos los judíos, desde el niño hasta el viejo, niños y mujeres en un día, en el trece del mes duodécimo, que es el mes de Adar, y para apoderarse de su despojo.
Y en ellas el rey daba facultad a los judíos que estaban en todas la ciudades, para que se juntasen y estuviesen a la defensa de su vida, prestos a destruir, y matar, y acabar con todo ejército de pueblo o provincia que viniese contra ellos, y aun niños y mujeres, y que tomaran de ellos el despojo,
diez hijos de Amán hijo de Hamedata, enemigo de los judíos; mas en el despojo no metieron su mano.
Y los judíos que estaban en Susa, se juntaron también el catorce del mes de Adar, y mataron en Susa trescientos hombres; mas en el despojo no metieron su mano.
Y los otros judíos que estaban en las provincias del rey, también se juntaron y se pusieron en defensa de su vida, y tuvieron reposo de sus enemigos, y mataron de sus enemigos setenta y cinco mil; mas en el despojo no metieron su mano.
Huyeron, huyeron reyes de ejércitos; y las que se quedaban en casa repartían el despojo.
Bet El corazón de su marido está en ella confiado, y no tendrá necesidad de despojo.
El SEÑOR vendrá a juicio contra los ancianos de su pueblo, y contra sus príncipes; porque vosotros habéis devorado la viña, y el despojo del pobre está en vuestras casas.
Y me dijo el SEÑOR: Tómate un gran volumen, y escribe en él en estilo vulgar Maher-salal-hasbaz. Date prisa al despojo, apresúrate a la presa.
Y Él extenderá sus manos en medio de ellos, como las extiende el nadador para nadar; y abatirá su soberbia junto con el despojo de sus manos.
Por tanto éste es pueblo saqueado y hollado; todos ellos han de ser enlazados en cavernas, y escondidos en cárceles. Serán puestos a despojo, y no habrá quien los libre; serán hollados, y no habrá quien diga: Restituid.
¿Quién entregó a Jacob al despojo, y a Israel a los saqueadores? ¿No fue el SEÑOR, contra quien pecamos? En sus caminos no quisieron andar, ni obedecieron su ley.
He aquí que subirá como nube, y su carro como torbellino; más ligeros son sus caballos que las águilas. ¡Ay de nosotros, porque dados somos a despojo!
Tus riquezas y tus tesoros daré a despojo sin ningún precio, por todos tus pecados, y en todos tus términos;
¡Mi montañés! En el campo son tus riquezas; todos tus tesoros daré a despojo, por el pecado de tus lugares altos en todos tus términos.
El que se quedare en esta ciudad, morirá a espada, o de hambre, o pestilencia; mas el que saliere, y se pasare a los caldeos que os tienen cercados, vivirá, y su alma le será por despojo.
``Por tanto, todos los que te devoran serán devorados, y todos tus adversarios, todos ellos, irán al cautiverio; todos los que te saquean serán saqueados, y a todos los que te despojan los daré al despojo.
Así dijo el SEÑOR: El que se quedare en esta ciudad morirá a espada, o de hambre, o de pestilencia; mas el que saliere a los caldeos vivirá, pues su vida le será por despojo, y vivirá.
Porque ciertamente te libraré, y no caerás a espada, sino que tu vida te será por despojo, porque tuviste confianza en mí, dijo el SEÑOR.
¿Y tú buscas para ti grandezas? No las busques; porque he aquí que yo traigo mal sobre toda carne, dijo el SEÑOR, y a ti te daré tu vida por despojo en todos los lugares adonde fueres.
Y serán sus camellos por presa, y la multitud de sus ganados por despojo; y los esparciré por todos los vientos, echados hasta el postrer rincón; y de todos sus lados les traeré su ruina, dijo el SEÑOR.
Y Caldea será para despojo; todos los que la saquearen, quedarán saciados, dice Jehová.
y en mano de extraños la entregué para ser saqueada, y en despojo a los impíos de la tierra, y la contaminarán.
Su padre, por cuanto hizo agravio, despojó violentamente al hermano, e hizo en medio de su pueblo lo que no es bueno, he aquí que él morirá por su iniquidad.
por tanto, he aquí, yo he extendido mi mano contra ti y te daré por despojo a las naciones; te cortaré de entre los pueblos y te exterminaré de entre las tierras. Te destruiré; y sabrás que yo soy el SEÑOR.'
``Será tendedero de redes en medio del mar, porque yo he hablado" --declara el Señor DIOS-- ``y ella será despojo para las naciones.
Por tanto, así dice el Señor DIOS: He aquí, daré la tierra de Egipto a Nabucodonosor, rey de Babilonia. Se llevará sus riquezas, capturará su botín y tomará su despojo; y esto será la paga para su ejército.
Y los sabios del pueblo darán sabiduría a muchos; y caerán a espada y a fuego, en cautividad y despojo, por algunos días.
Cuando llegó la noticia al rey de Nínive, se levantó de su trono, se despojó de su manto, se cubrió de cilicio y se sentó sobre ceniza.
Levántate y trilla, hija de Sión, porque tu cuerno tornaré de hierro, y tus uñas de bronce, y desmenuzarás muchos pueblos; y consagrarás a Jehová su despojo, y sus riquezas al Señor de toda la tierra.
¿No se levantarán de repente tus acreedores, y se despertarán tus cobradores? Ciertamente serás despojo para ellos.
Por tanto, esperadme, dijo el SEÑOR, el día que me levantaré al despojo; porque mi juicio es de coger los gentiles, juntar los reinos, para derramar sobre ellos mi enojo, toda la ira de mi furor; porque del fuego de mi celo será consumida toda la tierra.
Porque he aquí yo alzo mi mano sobre ellos, y serán despojo a sus siervos, y sabréis que el SEÑOR de los ejércitos me envió.
sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres.
Porque tuvisteis compasión de los prisioneros y aceptasteis con gozo el despojo de vuestros bienes, sabiendo que tenéis para vosotros mismos una mejor y más duradera posesión.