'Herido' en la Biblia
Si el ladrón fuere hallado forzando una casa, y fuere herido y muriere, el que lo hirió no será culpado de su muerte.
Herido o magullado, roto o cortado, no ofreceréis al SEÑOR, ni en vuestra tierra lo haréis.
Entonces el SEÑOR abrió la boca al asna, la cual dijo a Balaam: ¿Qué te he hecho, que me has herido estas tres veces?
Y el ángel del SEÑOR le dijo: ¿Por qué has herido tu asna estas tres veces? He aquí yo he salido por tu adversario, porque tu camino es perverso delante de mí.
El SEÑOR te entregará herido delante de tus enemigos; por un camino saldrás a ellos, y por siete caminos huirás delante de ellos; y serás por estremecimiento a todos los reinos de la tierra.
Y cuando el pueblo volvió al campamento, los ancianos de Israel dijeron: ¿Por qué nos ha herido hoy el SEÑOR delante de los filisteos? Traigamos a nosotros de Silo el arca del pacto del SEÑOR, para que viniendo entre nosotros nos salve de la mano de nuestros enemigos.
Entonces hirió Dios de los de Bet-semes, porque habían mirado el arca del SEÑOR; hirió en el pueblo setenta varones y cincuenta mil hombres. Y el pueblo puso luto, porque el SEÑOR había herido el pueblo de tan gran plaga.
Y todo Israel oyó lo que se decía: Saúl ha herido la guarnición de los filisteos; y también que Israel olía mal a los filisteos. Y se juntó el pueblo en pos de Saúl en Gilgal.
Y cuando David y los suyos vinieron a Siclag al tercer día, los de Amalec habían invadido al mediodía y a Siclag, y habían herido a Siclag, y la habían quemado a fuego.
Y se entristeció David por haber herido el SEÑOR a Uza; y fue llamado aquel lugar Pérez-uza (rotura de Uza ), hasta hoy.
Entonces oyendo Toi, rey de Hamat, que David había herido todo el ejército de Hadad-ezer,
Y escribió en la carta, diciendo: Poned a Urías delante de la fuerza de la batalla, y desamparadle, para que sea herido y muera.
Y así mismo había sido la palabra del SEÑOR por Jehú, hijo de Hanani, profeta sobre Baasa y sobre su casa, y sobre todo lo malo que hizo a los ojos del SEÑOR, provocándole a ira con las obras de sus manos, para que fuese hecha como la casa de Jeroboam; y sobre la que lo había herido.
Mas un varón disparando su arco en su perfección, hirió al rey de Israel por entre las junturas y las corazas; por lo que dijo él a su carretero: Da la vuelta, y sácame del campo, que estoy herido.
Ciertamente has herido a Edom, y tu corazón te ha envanecido; gloríate pues , mas estáte en tu casa. ¿Para qué te entremeterás en un mal, para que caigas tú, y Judá contigo?
Y se agravó la batalla sobre Saúl, y le alcanzaron los flecheros, y fue herido de los flecheros.
Mas disparando uno el arco con toda su capacidad, hirió al rey de Israel entre las junturas y el coselete. El entonces dijo al carretero: Vuelve tu mano, y sácame del campo, porque estoy herido.
Tú dices: He aquí he herido a Edom; y con esto tu corazón se enaltece para gloriarte; ahora estáte en tu casa; ¿para qué te entrometes en mal, para caer tú y Judá contigo?
Y le miró Azarías el sumo sacerdote, y todos los sacerdotes, y he aquí la lepra estaba en su frente; y le hicieron salir aprisa de aquel lugar; y él también se dio prisa a salir, porque el SEÑOR lo había herido.
Porque a más de esto, los idumeos habían venido y herido a los de Judá, y habían llevado cautivos.
porque sacrificó a los dioses de Damasco que le habían herido, y dijo: Pues que los dioses de los reyes de Siria les ayudan, yo también sacrificaré a ellos para que me ayuden; habiendo sido éstos su ruina, y la de todo Israel.
Y los arqueros hirieron al rey Josías con una flecha; y dijo el rey a sus siervos: Quitadme de aquí, porque estoy herido gravemente.
He aquí ha herido la peña, y corrieron aguas, y arroyos salieron ondeando: ¿Podrá también dar pan? ¿Aparejará carne a su pueblo?
Mi corazón fue herido, y se secó como la hierba; por lo cual me olvidé de comer mi pan.
Porque yo soy pobre y necesitado; y mi corazón está herido dentro de mí.
¿Acaso ha sido herido como quien lo hirió? ¿O ha sido muerto como los que lo mataron?
Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.
Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados. El castigo de nuestra paz fue sobre él; y por su llaga hubo cura para nosotros.
De la cárcel y del juicio fue quitado. Y su generación, ¿quién la contará? Porque cortado fue de la tierra de los vivientes. Por la rebelión de mi pueblo fue herido.
por causa de los caldeos; porque temían de ellos, por haber herido Ismael, hijo de Netanías, a Gedalías, hijo de Ahicam, al cual el rey de Babilonia había puesto sobre la tierra.
Y aconteció que, habiéndolos herido, yo quedé, y me postré sobre mi rostro, y clamé, y dije: ¡Ah, Señor DIOS! ¿Has de destruir todo el remanente de Israel derramando tu furor sobre Jerusalén?
Y fortificaré los brazos del rey de Babilonia, y pondré mi espada en su mano; mas quebraré los brazos de Faraón, y delante de aquél gemirá con gemidos de herido de muerte.
Efraín fue herido, su cepa se secó, no hará más fruto; aunque engendren, yo mataré lo deseable de su vientre.
Y le preguntarán: ¿Qué heridas son éstas que tienes en tus manos? Y él responderá: Con ellas fui herido en Casa de mis amigos.