35 Versículo de la Biblia sobre Comer

En el desierto te alimentó con el maná que tus padres no habían conocido, para humillarte y probarte, y para finalmente hacerte bien.

Y ordenó el SEÑOR Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer, pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque el día que de él comas, ciertamente morirás.

Por tanto, cuando os reunís, esto {ya} no es comer la cena del Señor, porque al comer, cada uno toma primero su propia cena; y uno pasa hambre y otro se embriaga. ¿Qué? ¿No tenéis casas para comer y beber? ¿O menospreciáis la iglesia de Dios y avergonzáis a los que nada tienen? ¿Qué os diré? ¿Os alabaré? En esto no os alabaré.

Pues vosotros mismos sabéis cómo debéis seguir nuestro ejemplo, porque no obramos de manera indisciplinada entre vosotros, ni comimos de balde el pan de nadie, sino que con trabajo y fatiga trabajamos día y noche a fin de no ser carga a ninguno de vosotros; no porque no tengamos derecho {a ello}, sino para ofrecernos como modelo a vosotros a fin de que sigáis nuestro ejemplo.Leer más.
Porque aun cuando estábamos con vosotros os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, que tampoco coma.

cuyo fin es perdición, cuyo dios es {su} apetito y {cuya} gloria está en su vergüenza, los cuales piensan sólo en las cosas terrenales.

Y hubo gran clamor del pueblo y de sus mujeres contra sus hermanos judíos. Había quienes decían: Nosotros, nuestros hijos y nuestras hijas somos muchos; por tanto, que se nos dé trigo para que comamos y vivamos.

Allí serviréis a dioses hechos por manos de hombre, de madera y de piedra, que no ven, ni oyen, ni comen, ni huelen.

Mi corazón ha sido herido como la hierba y se ha secado, y {hasta} me olvido de comer mi pan.

Yo fui joven, y ya soy viejo, y no he visto al justo desamparado, ni a su descendencia mendigando pan.

Los pobres comerán y se saciarán; los que buscan al SEÑOR, le alabarán. ¿Viva vuestro corazón para siempre!

El justo come hasta saciar su alma, pero el vientre de los impíos sufre escasez.

Tendréis mucho que comer y os saciaréis, y alabaréis el nombre del SEÑOR vuestro Dios, que ha obrado maravillosamente con vosotros; y nunca jamás será avergonzado mi pueblo.

Por tanto, que nadie se constituya en vuestro juez con respecto a comida o bebida, o en cuanto a día de fiesta, o luna nueva, o día de reposo; cosas que {sólo} son sombra de lo que ha de venir, pero el cuerpo pertenece a Cristo.