'Higos' en la Biblia
``Ciertamente los destruiré," declara el SEÑOR; ``No habrá uvas en la vid, Ni higos en la higuera, Y la hoja se marchitará; Lo que les he dado, les será quitado."'"
Después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, desterró a Jeconías, hijo de Joacim, rey de Judá, y a los oficiales de Judá junto con los artesanos y herreros de Jerusalén, y los llevó a Babilonia, el SEÑOR me mostró dos cestas de higos colocadas delante del templo del SEÑOR.
Una cesta tenía higos muy buenos, como los primeros higos maduros; y la otra tenía higos muy malos, que de podridos no se podían comer.
Entonces el SEÑOR me dijo: `` ¿Qué ves, Jeremías?" Yo dije: ``Higos; los higos buenos son muy buenos, pero los malos son muy malos, que de podridos no se pueden comer."
``Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `Como a estos higos buenos, así consideraré como buenos a los desterrados de Judá que Yo he echado de este lugar a la tierra de los Caldeos.
~`Pero como a los higos malos que de podridos no se pueden comer,' así dice el SEÑOR, `de la misma manera abandonaré a Sedequías, rey de Judá, a sus oficiales, al remanente de Jerusalén que queda en esta tierra y a los que habitan en la tierra de Egipto.
así dice el SEÑOR de los ejércitos: `Yo envío contra ellos la espada, el hambre y la pestilencia, y los pondré como higos reventados que de podridos no se pueden comer.