'Huesos' en la Biblia
Ten piedad de mí, SEÑOR, porque estoy sin fuerza; Sáname, SEÑOR, porque mis huesos se estremecen.
Soy derramado como agua, Y todos mis huesos están descoyuntados; Mi corazón es como cera; Se derrite en medio de mis entrañas.
Puedo contar todos mis huesos; Ellos me miran, me observan.
El guarda todos sus huesos; Ni uno de ellos es quebrantado.
Dirán todos mis huesos: ``SEÑOR, ¿quién como Tú, Que libras al afligido de aquél que es más fuerte que él, Sí, al afligido y al necesitado de aquél que lo despoja?"
Nada hay sano en mi carne a causa de Tu indignación; En mis huesos no hay salud a causa de mi pecado.
Como quien quebranta mis huesos, mis adversarios me afrentan, Mientras me dicen todo el día: `` ¿Dónde está tu Dios?"
Hazme oír gozo y alegría, Haz que se regocijen los huesos que has quebrantado.
{Donde antes} no había terror, allí tiemblan de espanto, Porque Dios esparció los huesos del que acampaba contra ti; Tú {los} avergonzaste, porque Dios los había rechazado.
Porque mis días han sido consumidos en humo, Y como brasero han sido quemados mis huesos.
A causa de la intensidad de mi gemido Mis huesos se pegan a la piel.
Se vistió de maldición como {si fuera} su manto, Y entró como agua en su cuerpo Y como aceite en sus huesos.
Como cuando se ara y se rompe la tierra, Nuestros huesos han sido esparcidos a la boca del Seol.