'Joven' en la Biblia
Y capturó a un joven de Sucot y lo interrogó. Entonces {el joven} le dio por escrito {los nombres de} los príncipes de Sucot y de sus ancianos, setenta y siete hombres.
Y dijo a Jeter su primogénito: ``Levántate y mátalos." Pero el joven no sacó la espada porque tenía temor, pues todavía era muchacho.
Entonces Sansón descendió a Timnat con su padre y con su madre, y llegó hasta los viñedos de Timnat. Y allí un león joven {venía} rugiendo hacia él.
Había un joven de Belén (Casa del Pan) de Judá, de la familia de Judá, que era Levita y extranjero allí.
El Levita consintió en quedarse con el hombre, y el joven fue para él como uno de sus hijos.
Micaía consagró al Levita, y el joven vino a ser su sacerdote, y vivió en la casa de Micaía.
Cuando estaban cerca de la casa de Micaía, reconocieron la voz del joven Levita; y llegándose allá, le dijeron: `` ¿Quién te trajo aquí? ¿Qué estás haciendo en este {lugar} y qué tienes aquí?"
Allí se desviaron y llegaron a la casa del joven Levita, a la casa de Micaía, y le preguntaron cómo estaba.
Su marido se levantó y fue tras ella para hablarle cariñosamente y hacerla volver, llevando consigo a su criado y un par de asnos. Y ella lo llevó dentro de la casa de su padre, y cuando el padre de la joven lo vio, se alegró de conocerlo.
Su suegro, el padre de la joven, lo retuvo, y se quedó con él tres días. Y comieron, bebieron y se alojaron allí.
Al cuarto día se levantaron muy de mañana y el levita se preparó para irse; y el padre de la joven dijo a su yerno: ``Aliméntate con un bocado de pan y después se pueden ir."
Se sentaron, pues, los dos y comieron y bebieron juntos. Y el padre de la joven dijo al hombre: ``Te ruego que te dignes pasar la noche, y que se alegre tu corazón."
Y al quinto día se levantó muy de mañana para irse, y el padre de la joven dijo: ``Aliméntate, te ruego, y espera hasta la tarde;" y los dos comieron.
Cuando el hombre se levantó para irse con su concubina y su criado, su suegro, el padre de la joven, le dijo: ``Mira, ya ha declinado el día; te ruego que pases la noche, pues el día llega a su fin. Pasa la noche aquí para que se alegre tu corazón. Y mañana se levantarán temprano para su viaje y te irás a tu casa."
"Sin embargo, tenemos paja y forraje para nuestros asnos, y también pan y vino para mí, para tu sierva y para el joven que está con tu siervo; no {nos} falta nada."