'Lágrimas' en la Biblia
Heme consumido a fuerza de gemir; todas las noches inundo mi lecho, riego mi estrado con mis lágrimas.
Oye mi oración, oh SEÑOR, y escucha mi clamor; no calles ante mis lágrimas; porque peregrino soy contigo, y advenedizo, como todos mis padres.
Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, mientras me decían todos los días: ¿Dónde está tu Dios?
Mis huidas has contado tú; pon mis lágrimas en tu odre, ciertamente en tu libro.
Les diste a comer pan de lágrimas, y les diste a beber lágrimas con medida.
Pasando por el Valle de Baca (de Lágrimas) lo convierten en manantial, También las lluvias tempranas lo cubren de bendiciones.
Porque cenizas he comido por pan, y con lágrimas he mezclado mi bebida,
Porque has librado mi alma de la muerte, mis ojos de lágrimas, y mis pies de resbalar.
Ríos de lágrimas vierten mis ojos, porque ellos no guardan tu ley.
Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán.
El que con lágrimas anda, llevando la semilla de la siembra, en verdad volverá con gritos de alegría, trayendo sus gavillas.