'Servía' en la Biblia

Así halló José gracia en sus ojos, y le servía; y él le hizo mayordomo de su casa, y entregó en su poder todo lo que tenía.

Y el capitán de los de la guardia dio cargo de ellos a José, y él les servía; y estuvieron días en la cárcel.

Y aconteció que, alegrándose el corazón de ellos, dijeron: Llamad a Sansón, para que divierta delante de nosotros. Y llamaron a Sansón de la cárcel, y servía de juguete delante de ellos; y lo pusieron entre las columnas.

Y Micaía consagró al levita, y aquel joven le servía de sacerdote, y estaba en casa de Micaía.

Entonces Elcana se fue a Ramá, a su casa. Y el niño servía al SEÑOR delante del sacerdote Elí.

El joven Samuel servía al SEÑOR en presencia de Elí. La palabra del SEÑOR escaseaba en aquellos días, las visiones no eran frecuentes.

David fue a Saúl y le servía; y {Saúl} lo amó grandemente y lo hizo su escudero.

antes llamando a su criado que le servía le dijo: Echame ésta allá fuera, y tras ella cierra la puerta.

Y la joven era muy hermosa, la cual calentaba al rey, y le servía; mas el rey nunca la conoció.

Entonces Betsabé entró al rey a la cámara; y el rey era muy viejo; y Abisag, la sunamita servía al rey.

Y se volvió de en pos de él, y tomó un par de bueyes, y los mató, y con el equipo de los bueyes coció la carne de ellos, y la dio al pueblo que comieran. Después se levantó, y fue tras Elías, y le servía.

Mas Josafat dijo: ¿No hay aquí profeta del SEÑOR, para que consultemos al SEÑOR por él? Y uno de los siervos del rey de Israel respondió y dijo: Aquí está Eliseo hijo de Safat, que servía a Elías.

Y respondió el que le servía: ¿Cómo he de poner esto delante de cien varones? Mas él volvió a decir: Da al pueblo para que coman, porque así dijo el SEÑOR: Comerán, y sobrará.

Y de Siria habían salido escuadrones, y habían llevado cautiva de la tierra de Israel una muchacha que servía a la mujer de Naamán.

Y levantándose de mañana el que servía al varón de Dios, para salir, he aquí el ejército que tenía cercada la ciudad, con gente de a caballo y carros. Entonces su criado le dijo: ¡Ay, señor mío! ¿qué haremos?

Ruégote, oh Jehová, esté ahora atento tu oído á la oración de tu siervo, y la oración de tus siervos, quienes desean temer tu nombre: y ahora concede hoy próspero suceso á tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.

En verdad, la fuerza de sus manos ¿de qué me servía? Había desaparecido de ellos el vigor.

Fui, pues, al Eufrates y cavé, tomé el cinturón del lugar donde lo había escondido, y he aquí, el cinturón estaba podrido; no servía para nada.

Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.

Entonces llegando él, la tomó de su mano y la levantó; y luego la dejó la fiebre, y les servía.

E inclinándose hacia ella, riñó a la fiebre; y la fiebre la dejó; y ella levantándose luego, les servía.

Y le hicieron allí una cena y Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa juntamente con él.

Lo cual era figura de aquel tiempo presente, en el cual se ofrecían presentes y sacrificios que no podían hacer perfecto al que servía con ellos, en cuanto a la conciencia,