1 Crónicas 24:5
Repartiéronlos pues por suerte los unos con los otros: porque de los hijos de Eleazar y de los hijos de Ithamar hubo príncipes del santuario, y príncipes de la casa de Dios.
1 Crónicas 24:31
Estos también echaron suertes, como sus hermanos los hijos de Aarón, delante del rey David, y de Sadoc y de Ahimelech, y de los príncipes de las familias de los sacerdotes y Levitas: el principal de los padres igualmente que el menor de sus hermanos.
Josué 18:10
Y Josué les echó las suertes delante de Jehová en Silo; y allí repartió Josué la tierra á los hijos de Israel por sus porciones.
1 Crónicas 9:11
Y Azarías hijo de Hilcías, hijo de Mesullam, hijo de Sadoc, hijo de Meraioth, hijo de Achîtob, príncipe de la casa de Dios;
2 Crónicas 35:8
También sus príncipes ofrecieron con liberalidad al pueblo, y á los sacerdotes y Levitas. Hilcías, Zachârías y Jehiel, príncipes de la casa de Dios, dieron á los sacerdotes para hacer la pascua dos mil seiscientas ovejas, y trescientos bueyes.
Nehemías 11:11
Seraías hijo de Hilcías, hijo de Mesullam, hijo de Sadoc, hijo de Meraioth, hijo de Ahitub, príncipe de la casa de Dios,
Proverbios 16:33
La suerte se echa en el seno: Mas de Jehová es el juicio de ella.
Jonás 1:7
Y dijeron cada uno á su compañero: Venid, y echemos suertes, para saber por quién nos ha venido este mal. Y echaron suertes, y la suerte cayó sobre Jonás.
Mateo 26:3
Entonces los príncipes de los sacerdotes, y los escribas, y los ancianos del pueblo se juntaron al patio del pontífice, el cual se llamaba Caifás;
Mateo 27:1
Y VENIDA la mañana, entraron en consejo todos los príncipes de los sacerdotes, y los ancianos del pueblo, contra Jesús, para entregarle á muerte.
Hechos 1:26
Y les echaron suertes, y cayó la suerte sobre Matías; y fué contado con los once apóstoles.
Hechos 4:1
Y HABLANDO ellos al pueblo, sobrevinieron los sacerdotes, y el magistrado del templo, y los Saduceos,
Hechos 4:6
Y Anás, príncipe de los sacerdotes, y Caifás, y Juan y Alejandro, y todos los que eran del linaje sacerdotal;
Hechos 5:24
Y cuando oyeron estas palabras el pontífice y el magistrado del templo y los príncipes de los sacerdotes, dudaban en qué vendría á parar aquello.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido