1 Samuel 24:9
Y dijo David a Saúl: ¿Por qué oyes las palabras de los que dicen: Mira que David procura tu mal?
Levítico 19:16
No andarás chismeando en tu pueblo. No te pondrás contra la sangre de tu prójimo. Yo soy el SEÑOR.
1 Samuel 26:19
Ruego, pues, que el rey mi señor oiga ahora las palabras de su siervo. Si el SEÑOR te incita contra mí, huela él el olor del sacrificio; mas si fueren hijos de hombres, malditos sean ellos en presencia del SEÑOR, que me han echado hoy para que no me junte en la heredad del SEÑOR, diciendo: Ve y sirve a dioses ajenos.
Salmos 101:5
Al detractor de su prójimo a escondidas, a éste cortaré; al altivo de ojos, y de corazón vanidoso, a éste no puedo sufrir.
Salmos 141:6
Serán derribados de lugares fuertes sus jueces, y oirán mis palabras, que son suaves.
Proverbios 16:28
El hombre perverso levanta contienda; y el chismoso aparta los príncipes.
Proverbios 17:4
El malo está atento al labio inicuo; y el mentiroso escucha a la lengua maldiciente.
Proverbios 18:8
Las palabras del chismoso parecen blandas, mas ellas descienden hasta lo íntimo del vientre.
Proverbios 25:23
El viento del norte ahuyenta la lluvia, y el rostro airado la lengua detractora.
Proverbios 26:20-22
Sin leña se apaga el fuego; y donde no hay chismoso, cesa la contienda.
Proverbios 26:28
La falsa lengua aborrece al que atormenta; y la boca lisonjera hace resbaladero.
Proverbios 29:12
Del señor que escucha la palabra mentirosa, todos sus ministros son impíos.
Eclesiastés 7:21-22
Tampoco apliques tu corazón a todas las cosas que se hablaren, para que no oigas a tu siervo que dice mal de ti;
Santiago 3:6
Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. Así es la lengua entre nuestros miembros que contamina todo el cuerpo, e inflama el curso de nuestro naturaleza, y es inflamada del infierno.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido