1 Tesalonicenses 2:13

Por lo cual, también nosotros damos gracias a Dios sin cesar, de que habiendo recibido de nosotros la palabra para oír de Dios, la recibisteis no como palabra de hombres, sino (como a la verdad lo es) como palabra de Dios, la cual obra en vosotros los que creisteis.

Hebreos 4:12

Porque la Palabra de Dios es viva y eficaz, y más penetrante que toda espada de dos filos; y que alcanza hasta partir el alma y el espíritu, y las coyunturas, y los tuétanos; y que discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

Romanos 10:17

Luego la fe es por el oír; y el oído, por la palabra del Cristo.

Gálatas 4:14

y no desechasteis ni menospreciasteis mi aflicción que estaba en mi carne; antes me recibisteis como a un ángel de Dios, como al mismo Cristo Jesús.

Hechos 17:11

Y fueron éstos más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras, para ver si estas cosas eran así.

1 Tesalonicenses 1:2-3

Damos siempre gracias a Dios por todos vosotros, haciendo memoria de vosotros en nuestras oraciones;

Jeremías 23:28-29

El profeta con quien fuere el sueño, cuente el sueño; y con el que fuere mi palabra, cuente mi palabra verdadera. ¿Qué tiene que ver la paja con el trigo? Dijo el SEÑOR.

Jeremías 44:16

La palabra que nos has hablado en nombre del SEÑOR, no oímos de ti;

Mateo 10:13-14

Y si la casa fuere digna, vuestra paz vendrá sobre ella; mas si no fuere digna, vuestra paz se volverá a vosotros.

Mateo 10:20

Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.

Mateo 10:40

El que os recibe a vosotros, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió.

Lucas 5:1

Y aconteció, que estando él junto al lago de Genezaret, la multitud se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios.

Lucas 8:11

Es pues ésta la parábola: La simiente es la palabra de Dios.

Lucas 8:21

El entonces respondiendo, les dijo: Mi madre y mis hermanos son los que oyen mi palabra, y la hacen.

Lucas 11:28

Y él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan.

Juan 15:3

Ya vosotros sois limpios por la palabra que os he hablado.

Juan 17:17

Santifícalos en tu verdad; tu palabra es la Verdad.

Juan 17:19

Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad.

Hechos 2:41

Así que, los que recibieron su palabra, fueron bautizados; y fueron añadidas a ellos aquel día como tres mil personas.

Hechos 8:14

Y los apóstoles que estaban en Jerusalén, habiendo oído que Samaria había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan;

Hechos 10:33

Así que, luego envié a ti; y tú has hecho bien en venir. Ahora pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oír todo lo que Dios te ha mandado.

Hechos 13:44-46

Y el sábado siguiente se juntó casi toda la ciudad a oír la Palabra de Dios.

Hechos 13:48

Y los gentiles oyendo esto, se fueron gozosos, y glorificaban la palabra del Señor; y creyeron todos los que estaban ordenados para vida eterna.

Hechos 16:14

Entonces una mujer llamada Lidia, que vendía púrpura en la ciudad de Tiatira, temerosa de Dios, estaba oyendo; el corazón de la cual abrió el Señor para que estuviese atenta a lo que Pablo decía.

Hechos 16:30-34

y sacándolos fuera, les dice: Señores, ¿qué es necesario que yo haga para ser salvo?

Hechos 17:18-20

Y algunos filósofos de los epicúreos y de los estoicos, disputaban con él; y unos decían: ¿Qué quiere decir este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba a Jesús y la resurrección.

Hechos 17:32

Y así como oyeron de la resurrección de los muertos, unos se burlaban, y otros decían: Te oiremos acerca de esto otra vez.

Romanos 1:8-9

Primeramente, doy gracias a mi Dios por Jesús, el Cristo, acerca de todos vosotros, de que vuestra fe es predicada en todo el mundo.

Romanos 6:17-18

Gracias a Dios, que aunque fuisteis siervos del pecado, habéis obedecido de corazón a la forma de doctrina a la cual sois entregados;

2 Corintios 3:18

Por tanto nosotros todos, puestos los ojos como en un espejo en la gloria del Señor con cara descubierta, somos transformados de gloria en gloria en la misma semejanza, como por el Espíritu del Señor.

Colosenses 1:6

el cual ha llegado hasta vosotros, como está por todo el mundo; y fructifica, como también en vosotros, desde el día que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad,

1 Tesalonicenses 1:5-10

Por cuanto nuestro Evangelio no fue entre vosotros en palabra solamente, mas también en potencia, y en el Espíritu Santo, y en gran plenitud; como sabéis cuáles fuimos entre vosotros por causa de vosotros.

Santiago 1:18

El, de su voluntad nos ha engendrado por la Palabra de verdad, para que seamos las primicias de sus criaturas.

1 Pedro 1:23

siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra del Dios, viviente y que permanece para siempre.

1 Pedro 1:25

mas la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta es la Palabra que por el Evangelio os ha sido anunciada.

1 Pedro 2:2

desead, como niños recién nacidos, la leche racional, y que es sin engaño, para que por ella crezcáis en salud,

2 Pedro 1:16-21

Porque nosotros no os hemos dado a conocer la potencia y la venida de nuestro Señor Jesús, el Cristo, siguiendo fábulas por arte compuestas; sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad.

2 Pedro 3:2

para que tengáis memoria de las palabras que antes han sido dichas por los santos profetas, y de nuestro mandamiento, que somos apóstoles del Señor y Salvador;

1 Juan 3:3

Y cualquiera que tiene esta esperanza en él, se purifica, como él también es limpio.

1 Juan 5:4-5

Porque todo aquello que es nacido de Dios, vence al mundo; y esta es la victoria que vence al mundo, es a saber nuestra fe.

Treasury of Scripture Knowledge did not add

Sagradas Escrituras (1569)