2 Crónicas 12:2
Y en el quinto año del rey Roboam subió Sisac rey de Egipto contra Jerusalem, (por cuanto se habían rebelado contra Jehová,)
1 Reyes 11:40
Procuró por tanto Salomón de matar á Jeroboam, pero levantándose Jeroboam, huyó á Egipto, á Sisac rey de Egipto, y estuvo en Egipto hasta la muerte de Salomóm.
Jueces 2:13-15
Y dejaron á Jehová, y adoraron á Baal y á Astaroth.
1 Reyes 14:24-26
Y hubo también sodomitas en la tierra, é hicieron conforme á todas las abominaciones de las gentes que Jehová había echado delante de los hijos de Israel.
1 Crónicas 28:9
Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto, y con ánimo voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende toda imaginación de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; mas si lo dejares
2 Crónicas 7:19-20
Mas si vosotros os volviereis, y dejareis mis estatutos y mis preceptos que os he propuesto, y fuereis y sirviereis á dioses ajenos, y los adorareis,
2 Crónicas 36:14-19
Y también todos los príncipes de los sacerdotes, y el pueblo, aumentaron la prevaricación, siguiendo todas las abominaciones de las gentes, y contaminando la casa de Jehová, la cual él había santificado en Jerusalem.
Nehemías 9:26-27
Empero te irritaron, y rebeláronse contra ti, y echaron tu ley tras sus espaldas, y mataron tus profetas que protestaban contra ellos para convertirlos á ti; é hicieron grandes abominaciones.
Salmos 106:43-44
Muchas veces los libró; Mas ellos se rebelaron á su consejo, Y fueron humillados por su maldad.
Isaías 63:10
Mas ellos fueron rebeldes, é hicieron enojar su espíritu santo; por lo cual se les volvió enemigo, y él mismo peleó contra ellos.
Jeremías 2:19
Tu maldad te castigará, y tu apartamiento te condenará: sabe pues y ve cuán malo y amargo es tu dejar á Jehová tu Dios, y faltar mi temor en tí, dice el Señor Jehová de los ejércitos.
Jeremías 44:22-23
Y no pudo sufrir más Jehová á causa de la maldad de vuestras obras, á causa de las abominaciones que habíais hecho: por tanto vuestra tierra fué en asolamiento, y en espanto, y en maldición, hasta no quedar morador, como hoy.
Lamentaciones 5:15
Cesó el gozo de nuestro corazón; Nuestro corro se tornó en luto.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido