2 Crónicas 9:29
Los demás hechos de Salomón, primeros y postreros, ¿no está todo escrito en los libros de Natán profeta, y en la profecía de Ahías, el silonita, y en las visiones del vidente Iddo contra Jeroboam hijo de Nabat?
1 Crónicas 29:29
Y los hechos del rey David, primeros y postreros, están escritos en el libro de Samuel vidente, y en el libro del profeta Natán, y en el libro de Gad vidente,
1 Reyes 11:29
Aconteció, pues, en aquel tiempo, que saliendo Jeroboam de Jerusalén, le encontró en el camino el profeta Ahías, el silonita; y él estaba cubierto con una capa nueva; y estaban ellos dos solos en el campo.
1 Reyes 11:41-43
Los demás hechos de Salomón, y todas las cosas que hizo, y su sabiduría, ¿no están escritas en el libro de los hechos de Salomón?
2 Samuel 12:1
Y envió el SEÑOR a Natán ante David, el cual viniendo a él, le dijo: Había dos hombres en una ciudad, el uno rico, y el otro pobre.
2 Crónicas 12:15
Y las cosas de Roboam, primeras y postreras, ¿no están escritas en los libros de Semeías profeta y de Iddo, el vidente, en la cuenta de los linajes? Y entre Roboam y Jeroboam hubo perpetua guerra.
2 Crónicas 13:22
Los demás hechos de Abías, sus caminos, y sus palabras, están escritos en la historia de Iddo profeta.
2 Samuel 7:1-3
Y aconteció que, estando ya el rey asentado en su casa, después que el SEÑOR le había dado reposo de todos sus enemigos de alrededor,
2 Samuel 12:25
y envió por mano de Natán profeta, y llamó su nombre Jedidías, \'
1 Reyes 1:8
Mas Sadoc, el sacerdote, Benaía hijo de Joiada, Natán, el profeta, Simei, Rei, y todos los grandes de David, no seguían a Adonías.
1 Reyes 1:10-11
mas no convidó a Natán, el profeta, ni a Benaía, ni a los grandes, ni a Salomón su hermano.
1 Reyes 1:22-27
Y estando aún hablando ella con el rey, he aquí Natán, el profeta, que vino.
1 Reyes 1:32-38
Y el rey David dijo: Llamadme a Sadoc, el sacerdote, y a Natán, el profeta, y a Benaía hijo de Joiada. Y ellos entraron a la presencia del rey.
1 Reyes 14:2
y dijo Jeroboam a su mujer: Levántate ahora, disfrázate, para que no te conozcan que eres la mujer de Jeroboam, y ve a Silo; que allá está Ahías profeta, el que me dijo que yo había de ser rey sobre este pueblo.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido