2 Reyes 4:2

Y Eliseo le dijo: ¿Qué puedo hacer por ti? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite.

1 Reyes 17:12

Y ella respondió: Vive Jehová Dios tuyo, que no tengo pan cocido; que solamente un puñado de harina tengo en la tinaja, y un poco de aceite en una botija: y ahora recogía dos leños, para entrar y aderezarlo para mí y para mi hijo, para que lo comamos, y muramos.

2 Reyes 2:9

Y sucedió que cuando habían pasado, Elías dijo a Eliseo: Pide lo que quieres que haga por ti, antes que sea quitado de tu lado. Y dijo Eliseo: Te ruego que una doble porción de tu espíritu sea sobre mí.

2 Reyes 6:26-27

Y pasando el rey de Israel por el muro, una mujer le dio voces, y dijo: Salva, rey señor mío.

Mateo 15:34

Y Jesús les dijo: ¿Cuántos panes tenéis? Y ellos dijeron: Siete, y unos cuantos pececillos.

Juan 6:5-7

Cuando Jesús alzó sus ojos, y vio una gran multitud que había venido a Él, dijo a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman éstos?

Hechos 3:6

Y Pedro le dijo: No tengo plata ni oro; mas lo que tengo te doy: En el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.

2 Corintios 6:10

como entristecidos, mas siempre gozosos; como pobres, mas enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, mas poseyéndolo todo.

Santiago 2:5

Hermanos míos amados, oíd: ¿No ha escogido Dios a los pobres de este mundo, ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman?

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)