Parallel Verses
Spanish: Reina Valera Gómez
Entonces David se levantó de tierra, y se lavó y se ungió, y cambió sus ropas, y entró a la casa de Jehová, y adoró. Y después vino a su casa, y pidió, y le pusieron pan, y comió.
La Biblia de las Américas
Entonces David se levantó del suelo, se lavó, {se} ungió y se cambió de ropa; entró en la casa del SEÑOR y adoró. Después vino a su casa y cuando pidió, le pusieron comida delante y comió.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Entonces David se levantó de tierra, y se lavó y se ungió, y mudó sus ropas, y entró a la Casa del SEÑOR, y adoró. Y después vino a su casa, y demandó, y le pusieron pan, y comió.
Reina Valera 1909
Entonces David se levantó de tierra, y lavóse y ungióse, y mudó sus ropas, y entró á la casa de Jehová, y adoró. Y después vino á su casa, y demandó, y pusiéronle pan, y comió.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Entonces David se levantó del suelo, se lavó, {se} ungió y se cambió de ropa; entró en la casa del SEÑOR y adoró. Después vino a su casa y cuando pidió, le pusieron comida delante y comió.
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Entonces David se levantó de tierra, y se lavó y se ungió, y mudó sus ropas, y entró a la Casa del SEÑOR, y adoró. Y después vino a su casa, y demandó, y le pusieron pan, y comió.
New American Standard Bible
So David arose from the ground, washed, anointed himself, and changed his clothes; and he came into the house of the LORD and worshiped. Then he came to his own house, and when he requested, they set food before him and he ate.
Artículos
Referencias Cruzadas
Job 1:20
Entonces Job se levantó, y rasgó su manto, y rasuró su cabeza, y cayendo en tierra adoró;
Rut 3:3
Te lavarás pues, y te ungirás, y te pondrás tu vestido y bajarás a la era; pero no te darás a conocer al varón hasta que él haya acabado de comer y de beber.
2 Samuel 6:17
Metieron, pues, el arca de Jehová, y la pusieron en su lugar en medio de una tienda que David le había levantado: y sacrificó David holocaustos y ofrendas de paz delante de Jehová.
2 Samuel 7:18
Y entró el rey David, y se puso delante de Jehová, y dijo: Señor Jehová, ¿Quién soy yo, y qué es mi casa, para que tú me traigas hasta aquí?
Job 2:10
Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios.
Salmos 39:9
Enmudecí, no abrí mi boca; porque tú lo hiciste.
Eclesiastés 9:8
En todo tiempo sean blancas tus vestiduras, y nunca falte ungüento sobre tu cabeza.
Lamentaciones 3:39-41
¿Por qué murmura el hombre viviente, el hombre en su pecado?
Mateo 6:17
Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro;