2 Samuel 4:1

Luego que oyó el hijo de Saúl que Abner había sido muerto en Hebrón, sus manos se le debilitaron, y fue atemorizado todo Israel.

Esdras 4:4

Entonces el pueblo de la tierra debilitaba las manos del pueblo de Judá, atemorizándolo para que no edificara.

Isaías 13:7

Por tanto, toda mano se debilitará, y desfallecerá todo corazón de hombre;

Jeremías 6:24

Su fama hemos oído, y nuestras manos se descoyuntan; la angustia se apodera de nosotros, dolor como de mujer que está de parto.

2 Samuel 3:27

Y cuando Abner volvió a Hebrón, Joab lo apartó al medio de la puerta, hablando con él apaciblemente, y allí le hirió por la quinta costilla, a causa de la muerte de Asael su hermano, y murió.

2 Samuel 17:2

y daré sobre él mientras él está cansado y débil de manos; lo atemorizaré, y todo el pueblo que está con él huirá, y mataré al rey solo.

Nehemías 6:9

Porque todos ellos nos intimidaban, diciendo: Se debilitarán las manos de ellos en la obra, y no será hecha. Ahora, pues, oh Dios, fortalece mis manos.

Isaías 35:3

Fortaleced las manos cansadas, corroborad las rodillas endebles.

Jeremías 50:43

Oyó la noticia el rey de Babilonia, y sus manos se debilitaron; angustia le tomó, dolor como de mujer de parto.

Sofonías 3:16

En aquel tiempo se dirá a Jerusalén: No temas: Sión, no se debiliten tus manos.

Mateo 2:2-3

diciendo: ¿Dónde está el Rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)