Daniel 10:11

Y me dijo: Daniel, varón muy amado, está atento a las palabras que te hablaré, y levántate sobre tus pies; porque a ti he sido enviado ahora. Y cuando él hablaba conmigo estas palabras, yo estaba temblando.

Ezequiel 2:1

Y me dijo: Hijo de hombre, ponte sobre tus pies, y hablaré contigo.

Daniel 8:16-17

Y oí una voz de hombre entre las riberas de Ulai, que gritó y dijo: Gabriel, enseña a éste la visión.

Job 4:14-16

me sobrevino un espanto y un temblor, que estremeció todos mis huesos;

Job 37:1

Ante esto también tiembla mi corazón, y salta de su lugar.

Salmos 45:11

y deseará el Rey tu hermosura: Adórale, porque Él es tu Señor.

Cantares 7:10

Yo soy de mi amado, y conmigo tiene su contentamiento.

Daniel 9:22-23

Y me hizo entender, y habló conmigo, y dijo: Daniel, ahora he salido para darte sabiduría y entendimiento.

Daniel 10:3

No comí pan delicado, ni entró carne ni vino en mi boca, ni me ungí con ungüento, hasta que se cumplieron tres semanas.

Daniel 10:19

y me dijo: Varón muy amado, no temas; paz a ti; ten buen ánimo, y esfuérzate. Y hablando él conmigo recobré las fuerzas, y dije: Hable mi señor, porque me has fortalecido.

Marcos 16:8

Y ellas se fueron aprisa, huyendo del sepulcro, porque les había tomado temblor y espanto; y no dijeron nada a nadie, porque tenían miedo.

Juan 13:23

Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba recostado en el pecho de Jesús.

Juan 21:20

Entonces Pedro, volviéndose, ve a aquel discípulo al cual Jesús amaba, que los seguía, el que también se había recostado en su pecho en la cena, y le había dicho: Señor, ¿quién es el que te va a entregar?

Hechos 9:6

Y él, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer.

Hechos 26:16

Pero levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto te he aparecido, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto, y de aquellas en que me apareceré a ti,

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)