Deuteronomio 3:26
Mas Jehová se había enojado contra mí por causa de vosotros, por lo cual no me oyó: y díjome Jehová: Bástate, no me hables más de este negocio.
Deuteronomio 1:37
Y también contra mí se airó Jehová por vosotros, diciendo: Tampoco tú entrarás allá:
Deuteronomio 31:2
Y díjoles: De edad de ciento y veinte años soy hoy día; no puedo más salir ni entrar: á más de esto Jehová me ha dicho: No pasarás este Jordán.
Números 20:7-12
Y habló Jehová á Moisés, diciendo:
Números 27:12-14
Y Jehová dijo á Moisés: Sube á este monte Abarim, y verás la tierra que he dado á los hijos de Israel.
Deuteronomio 32:51-52
Por cuanto prevaricasteis contra mí en medio de los hijos de Israel en las aguas de la rencilla de Cades, en el desierto de Zin; porque no me santificasteis en medio de los hijos de Israel.
Deuteronomio 34:4
Y díjole Jehová: Esta es la tierra de que juré á Abraham, á Isaac, y á Jacob, diciendo: A tu simiente la daré. Hétela hecho ver con tus ojos, mas no pasarás allá.
1 Crónicas 17:4
Ve y di á David mi siervo: Así ha dicho Jehová: Tú no me edificarás casa en que habite:
1 Crónicas 17:12-13
El me edificará casa, y yo confirmaré su trono eternalmente.
1 Crónicas 22:7-9
Y dijo David á Salomón: Hijo mío, en mi corazón tuve el edificar templo al nombre de Jehová mi Dios.
1 Crónicas 28:2-4
Y levantándose el rey David, puesto en pie dijo: Oidme, hermanos míos, y pueblo mío. Yo tenía en propósito edificar una casa, para que en ella reposara el arca del pacto de Jehová, y para el estrado de los pies de nuestro Dios; y había ya aprestado todo p
Salmos 106:32-33
También le irritaron en las aguas de Meriba: E hizo mal á Moisés por causa de ellos;
Isaías 53:5-6
Mas él herido fué por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados: el castigo de nuestra paz sobre él; y por su llaga fuimos nosotros curados.
Mateo 20:22
Entonces Jesús respondiendo, dijo: No sabéis lo que pedís: ¿podéis beber el vaso que yo he de beber, y ser bautizados del bautismo de que yo soy bautizado? Y ellos le dicen: Podemos.
Mateo 26:39
Y yéndose un poco más adelante, se postró sobre su rostro, orando, y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí este vaso; empero no como yo quiero, sino como tú.
2 Corintios 12:8
Por lo cual tres veces he rogado al Señor, que se quite de mí.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido