Eclesiastés 1:13

Y dí mi corazón á inquirir y buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo: este penoso trabajo dió Dios á los hijos de los hombres, en que se ocupen.

Eclesiastés 3:10

Yo he visto el trabajo que Dios ha dado á los hijos de los hombres para que en él se ocupasen.

Eclesiastés 1:17

Y dí mi corazón á conocer la sabiduría, y también á entender las locuras y los desvaríos: conocí que aun esto era aflicción de espíritu.

Génesis 3:19

En el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas á la tierra; porque de ella fuiste tomado: pues polvo eres, y al polvo serás tornado.

Eclesiastés 7:25

Yo he rodeado con mi corazón por saber, y examinar, é inquirir la sabiduría, y la razón; y por conocer la maldad de la insensatez, y el desvarío del error;

Salmos 111:2

Grandes son las obras de Jehová; Buscadas de todos los que las quieren.

Proverbios 2:2-4

Haciendo estar atento tu oído á la sabiduría; Si inclinares tu corazón á la prudencia;

Proverbios 4:7

Sabiduría ante todo: adquiere sabiduría: Y ante toda tu posesión adquiere inteligencia.

Proverbios 18:1

SEGUN su antojo busca el que se desvía, Y se entremete en todo negocio.

Proverbios 18:15

El corazón del entendido adquiere sabiduría; Y el oído de los sabios busca la ciencia.

Proverbios 23:26

Dame, hijo mío, tu corazón, Y miren tus ojos por mis caminos.

Eclesiastés 2:23

Porque todos sus días no son sino dolores, y sus trabajos molestias: aun de noche su corazón no reposa. Esto también es vanidad.

Eclesiastés 2:26

Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría y ciencia y gozo, mas al pecador da trabajo, el que allegue y amontone, para que dé al que agrada á Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.

Eclesiastés 4:4

Visto he asimismo que todo trabajo y toda excelencia de obras mueve la envidia del hombre contra su prójimo. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.

Eclesiastés 8:9

Todo esto he visto, y puesto he mi corazón en todo lo que debajo del sol se hace: hay tiempo en que el hombre se enseñorea del hombre para mal suyo.

Eclesiastés 8:16-17

Yo pues dí mi corazón á conocer sabiduría, y á ver la faena que se hace sobre la tierra; (porque hay quien ni de noche ni de día ve sueño en su ojos;)

Eclesiastés 12:12

Ahora, hijo mío, á más de esto, sé avisado. No hay fin de hacer muchos libros; y el mucho estudio aflicción es de la carne.

1 Timoteo 4:15

Medita estas cosas; ocúpate en ellas; para que tu aprovechamiento sea manifiesto á todos.

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