Eclesiastés 4:16
No tiene fin todo el pueblo que fué antes de ellos: tampoco los que vendrán después estarán con él contentos. Y esto es también vanidad y aflicción de espíritu.
Eclesiastés 1:14
Yo miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu.
Jueces 9:19-20
Si con verdad y con integridad habéis obrado hoy con Jerobaal y con su casa, que gocéis de Abimelech, y él goce de vosotros.
2 Samuel 15:12-13
También envió Absalom por Achitophel Gilonita, del consejo de David, á Gilo su ciudad, mientras hacía sus sacrificios. Y la conjuración vino á ser grande, pues se iba aumentando el pueblo con Absalom.
2 Samuel 18:7-8
Y allí cayó el pueblo de Israel delante de los siervos de David, é hízose una gran matanza de veinte mil hombres.
2 Samuel 19:9
Y todo el pueblo porfiaba en todas las tribus de Israel, diciendo: El rey nos ha librado de mano de nuestros enemigos, y él nos ha salvado de mano de los Filisteos; y ahora había huído, de la tierra por miedo de Abaslom.
1 Reyes 1:5-7
Entonces Adonía hijo de Haggith se levantó, diciendo: Yo reinaré. E hízose de carros y gente de á caballo, y cincuenta hombres que corriesen delante de él.
1 Reyes 1:40
Después subió todo el pueblo en pos de él, y cantaba la gente con flautas, y hacían grandes alegrías, que parecía que la tierra se hundía con el clamor de ellos.
1 Reyes 12:10-16
Entonces los mancebos que se habían criado con él, le respondieron, diciendo: Así hablarás á este pueblo que te ha dicho estas palabras: Tu padre agravó nuestro yugo; mas tú disminúyenos algo: así les hablarás: El menor dedo de los míos es más grueso que
Eclesiastés 2:11
Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacer las: y he aquí, todo vanidad y aflicción de espíritu, y no hay provecho debajo del sol.
Eclesiastés 2:17
Aborrecí por tanto la vida, porque la obra que se hace debajo del sol me era fastidiosa; por cuanto todo es vanidad y aflicción de espíritu.
Eclesiastés 2:26
Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría y ciencia y gozo, mas al pecador da trabajo, el que allegue y amontone, para que dé al que agrada á Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido