Ezequiel 3:24
Entonces entró espíritu en mí, y afirmóme sobre mis pies, y hablóme, y díjome: Entra, y enciérrate dentro de tu casa.
Ezequiel 2:2
Y entró espíritu en mí luego que me habló, y afirmóme sobre mis pies, y oía al que me hablaba.
Ezequiel 4:1-4
Y TU, hijo del hombre, tómate un adobe, y ponlo delante de tí, y diseña sobre él la ciudad de Jerusalem:
Ezequiel 37:10
Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies, un ejército grande en extremo.
Daniel 10:8-10
Quedé pues yo solo, y vi esta gran visión, y no quedó en mí esfuerzo; antes mi fuerza se me trocó en desmayo, sin retener vigor alguno.
Daniel 10:19
Y díjome: Varón de deseos, no temas: paz á ti; ten buen ánimo, y aliéntate. Y hablando él conmigo cobré yo vigor, y dije: Hable mi señor, porque me has fortalecido.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido