Filipenses 1:20

conforme a mi expectación y esperanza, que en nada seré avergonzado; antes con toda confianza, como siempre, así también ahora, Cristo será magnificado en mi cuerpo, o por vida, o por muerte.

1 Corintios 6:20

Porque comprados sois por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.

Romanos 5:5

y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos es dado.

Romanos 8:19

Porque el anhelo ardiente de las criaturas, espera la manifestación de los hijos de Dios.

1 Pedro 4:16

Pero si alguno padece como cristiano, no se avergüence; antes glorifique a Dios por ello.

Filipenses 1:14

Y muchos de los hermanos en el Señor, tomando ánimo con mis prisiones, se atreven mucho más a hablar la palabra sin temor.

Salmos 25:2

Dios mío, en ti confío; no sea yo avergonzado, no se alegren de mí mis enemigos.

Salmos 62:5

Alma mía, espera solamente en Dios; porque en Él está mi esperanza.

Salmos 119:80

Sea mi corazón íntegro en tus estatutos; para que no sea yo avergonzado.

Salmos 119:116

Susténtame conforme a tu palabra, y viviré; y no dejes que me avergüence de mi esperanza.

Proverbios 10:28

La esperanza de los justos es alegría; mas la esperanza de los impíos perecerá.

Proverbios 23:18

Porque ciertamente hay porvenir, y tu esperanza no será cortada.

Isaías 45:17

Israel será salvo en Jehová con salvación eterna; no seréis avergonzados ni humillados, por toda la eternidad.

Isaías 50:7

Porque el Señor Jehová me ayudará; por tanto no seré confundido; por eso puse mi rostro como un pedernal, y sé que no seré avergonzado.

Isaías 54:4

No temas, pues no serás avergonzada; y no te avergüences, que no serás afrentada; porque te olvidarás de la vergüenza de tu juventud, y de la afrenta de tu viudez no tendrás más memoria.

Juan 12:27-28

Ahora está turbada mi alma; ¿y qué diré? ¡Padre, sálvame de esta hora! Mas para esto he venido a esta hora.

Juan 21:19

Esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, le dijo: Sígueme.

Hechos 20:24

Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo mi vida preciosa para mí mismo; con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.

Hechos 21:13

Entonces Pablo respondió: ¿Qué hacéis llorando y quebrantándome el corazón? Porque yo estoy dispuesto no sólo a ser atado, sino aun a morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús.

Romanos 6:13

ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad; sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia.

Romanos 6:19

Hablo humanamente, por causa de la debilidad de vuestra carne; que así como presentasteis vuestros miembros como siervos a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora presentéis vuestros miembros como siervos a la justicia y a la santidad.

Romanos 9:33

como está escrito: He aquí pongo en Sión piedra de tropiezo, y roca de caída: Y todo aquel que en Él creyere, no será avergonzado.

Romanos 12:1

Por tanto, os ruego hermanos por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro servicio racional.

Romanos 14:7-9

Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí.

1 Corintios 7:34

También hay diferencia entre la casada y la virgen. La soltera tiene cuidado de las cosas del Señor, para ser santa así en cuerpo como en espíritu; mas la casada tiene cuidado de las cosas del mundo, de cómo ha de agradar a su marido.

1 Corintios 15:31

Os aseguro por la gloria que de vosotros tengo en Cristo Jesús Señor nuestro, que cada día muero.

2 Corintios 2:14-16

Mas a Dios gracias, el cual hace que siempre triunfemos en Cristo, y manifiesta la fragancia de su conocimiento por nosotros en todo lugar.

2 Corintios 4:10

llevando siempre por todas partes en el cuerpo la muerte del Señor Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos.

2 Corintios 5:15

y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para Aquél que murió y resucitó por ellos.

2 Corintios 7:14

Que si de algo me he gloriado con él acerca de vosotros, no me avergüenzo; pues como os hemos hablado todo con verdad, así también nuestra gloria delante de Tito fue hallada verdadera.

2 Corintios 10:8

Porque aunque me gloríe algo más de nuestra autoridad, la cual el Señor nos dio para edificación y no para vuestra destrucción, no me avergonzaré;

Efesios 6:19-20

y por mí, para que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio;

Filipenses 1:23-24

Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor;

Filipenses 2:17

Y aunque sea ofrecido sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y regocijo con todos vosotros.

Colosenses 1:24

Que ahora me regocijo en lo que padezco por vosotros, y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia,

1 Tesalonicenses 5:23

Y el mismo Dios de paz os santifique enteramente; y que todo vuestro espíritu y alma y cuerpo sean guardados irreprensibles para la venida de nuestro Señor Jesucristo.

2 Timoteo 4:6-7

Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano.

2 Pedro 1:12-15

Por esto, yo no dejaré de recordaros siempre estas cosas, aunque vosotros las sepáis, y estéis afirmados en la verdad presente.

1 Juan 2:28

Y ahora, hijitos, permaneced en Él; para que cuando Él apareciere, tengamos confianza, y no seamos avergonzados delante de Él en su venida.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)