Génesis 3:19

Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

Salmos 104:29

Escondes tu rostro, se turban; les quitas el hálito, dejan de ser, y vuelven al polvo.

Génesis 2:7

Formó, pues, Jehová Dios al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida; y fue el hombre un alma viviente.

Eclesiastés 12:7

y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio.

Job 34:15

toda carne perecería juntamente, y el hombre se tornaría en polvo.

Salmos 90:3

Vuelves al hombre hasta ser quebrantado, y dices: Convertíos, hijos de los hombres.

Eclesiastés 3:20

Todo va a un mismo lugar; todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo.

2 Tesalonicenses 3:10

Porque aun cuando estábamos con vosotros, os mandábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.

Génesis 18:27

Y Abraham replicó y dijo: He aquí ahora que he comenzado a hablar a mi Señor, aunque soy polvo y ceniza:

Génesis 23:4

Peregrino y advenedizo soy entre vosotros; dadme heredad de sepultura con vosotros, y sepultaré mi muerta de delante de mí.

Job 1:21

y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito.

Job 17:13-16

Si yo espero, el sepulcro es mi casa: Haré mi cama en las tinieblas.

Job 19:26

y después de deshecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios;

Job 21:26

Igualmente yacerán ellos en el polvo, y gusanos los cubrirán.

Salmos 22:15

Se secó como un tiesto mi vigor, y mi lengua se pegó a mi paladar; y me has puesto en el polvo de la muerte.

Salmos 22:29

Comerán y adorarán todos los poderosos de la tierra; se postrarán delante de Él todos los que descienden al polvo, si bien ninguno puede conservar la vida de su propia alma.

Salmos 103:14

Porque Él conoce nuestra condición; se acuerda que somos polvo.

Proverbios 21:16

El hombre que se extravía del camino de la sabiduría, vendrá a parar en la compañía de los muertos.

Eclesiastés 1:3

¿Qué provecho tiene el hombre de todo su trabajo con que se afana debajo del sol?

Eclesiastés 1:13

Y di mi corazón a inquirir y buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo; este penoso trabajo dio Dios a los hijos de los hombres, para que se ocupen en él.

Eclesiastés 5:15

Como salió del vientre de su madre, desnudo, así volverá, yéndose tal como vino; y nada tomará de su trabajo para llevar en su mano.

Daniel 12:2

Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

Romanos 5:12-21

Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.

1 Corintios 15:21-22

Y por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.

Efesios 4:28

El que hurtaba, no hurte más; antes trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padeciere necesidad.

1 Tesalonicenses 2:9

Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; que trabajando noche y día, para no ser carga a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)